Tiempos politicos.

El calendario avanza y el tiempo se acorta para alcanzar las fechas, cuando los partidos políticos realicen sus designaciones por las candidaturas a las alcaldías y diputaciones locales. En lo que corresponde a Mazatlán, la competencia fuerte está prevista entre el PRI y el PAN. En el panismo, se anuncia la alianza con el PRD, mientras que en el PRI no se habla al respecto; pero se espera que, llegado el momento, el tricolor dé a conocer con cual partido se unirá y participará en la contienda. PT y Movimiento Ciudadano, impulsores de la candidatura del actual gobernador Mario López Valdez en el 2010 -como integrantes de la alianza con el PAN y PRD-, se mantienen discretos pero no será por mucho tiempo. Esta actitud la mantendrán en tanto valoren las ofertas y entren en negociaciones. Les queda tiempo. No será sorpresa si van juntos de nuevo. En el Partido Nueva Alianza (Panal) no se advierten prisas, les preocupa más mantenerse en protesta contra la recién aprobada Reforma Educativa. La decisión del Verde Ecologista, de marchar al lado del PRI, no sería sorpresa. Ahorita están de por medio las negociaciones y los pactos futuros de los siete partidos
Instituciones cortesanas
Raymundo Riva Palacio (El Universal)
Por las mejores razones o por las más oscuras, con la mayor pulcritud o la más grande opacidad, sobre sustentos reales e impolutos, o débiles y llenos de lagunas jurídicas, dos de las instituciones de segunda generación democrática –el IFE y la Suprema Corte de Justicia– están seriamente heridas por sus controversiales fallos de los últimos días, que proyectan falta de equilibrio e imparcialidad, que dañan su credibilidad y sugieren un retroceso donde, además de la democracia, los perdedores incluyen a los ciudadanos y al presidente Enrique Peña Nieto. La forma como se han comportado varios miembros de esas instituciones, con falta de liderazgo para explicar con fuerza, sin vergüenzas ni ocultamientos sus acciones y decisiones, incuban sospechas de imparcialidad, y desatan temores de que en México se vive una regresión política. Ciudadanos que a través de la lucha y financiar con impuestos su funcionamiento, pueden ver pérdidas en su autonomía, más allá si son reales o no. Al presidente Peña Nieto, cuando en sus decisiones siempre sale beneficiado, se le transfiere el costo de que las instituciones están acatando su voluntad. La síntesis de esta idea la expresó el líder del PRD, Jesús Zambrano, quien afirmó en Proyecto 40, que los consejeros del IFE recibían "línea" de Los Pinos. La mera idea de que esto sucede altera y vulnera la construcción de acuerdos políticos en las que se embarcó el Presidente, desde el Pacto por México hasta reformas como la energética y la fiscal, y lastima la larga lucha democrática ciudadana. El caso del IFE es el que más polémica suscita. Desde la semana pasada irritaron a las fuerzas políticas y a un abanico de medios de comunicación, cuando los consejeros exoneraron al PRI de financiamientos ilegales al PRI en la campaña presidencial a través de Monex. La polémica continuó esta semana al actuar, según el PRD y el PAN, en forma discrecional multar por violar los topes de campaña, en beneficio de Peña Nieto. El tema será discutido en los próximos días, pero un caso ejemplifica la molestia: el cierre de campaña del priista en el estadio Azteca. Zambrano dijo que tuvo un costo de 500 mil pesos. El consejero Marco Baños explicó que conforme a la ley, el monto se prorratea si en el acto participaron otros candidatos, como sucedió ese día donde Peña Nieto fue acompañado por candidatos a diputados, locales y federales y senadores. Lo que no dijo Baños es que esos 500 mil pesos fue el total del costo, lo que significaría, por ejemplo, que por cada uno de los 400 camiones en los que movilizaron a miles de asistentes, se hubiera pagado mil 250 pesos, al menos 20% más barato que el precio comercial más bajo, y que el gasto de Peña Nieto no hubiera rebasado los 25 mil pesos. El IFE, que tendrá que revisar y explicar estas inconsistencias, no está más dañado que la Suprema Corte de Justicia, que votó por liberar a Florence Cassez, condenada a 60 años por secuestro, con un voto definitorio de Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, ministro propuesto por el PRI y respaldado por otros dos ministros cercanos también al PRI y una al gobierno francés. Esta semana, en forma unánime votaron contra el amparo del SME, con lo cual ahorran un pago multimillonario de salarios caídos al gobierno de Peña Nieto, tras cambiar un criterio de la misma Corte hace 90 días que la disputa era legal, no constitucional, y liberado al Presidente de cualquier responsabilidad. La falta de liderazgo han contribuido al descrédito al no haber sido capaces de aclarar que sus decisiones, que beneficiaron al PRI y el presidente Peña Nieto, no fueron sesgadas. Sus argumentos, si bien ciertos, no son convincentes porque pasaron por alto decisiones legales y más justas para todos –como en el caso Cassez que no se repuso el juicio que reconocería a las víctimas y quizás también la liberaría–, o el de los topes de campaña, donde están en un embrollo por sus medias verdades. Hasta ahora, esas incapacidades les han costado a ellos y al propio presidente. Con la información disponible hasta este momento no se puede argumentar que hubo injerencia presidencial o del PRI en esos fallos. Pero lo que sí se puede argumentar políticamente, es que al caer estas decisiones todas del lado del PRI y Peña Nieto, su comportamiento puede catalogarse, al menos, de cortesano con el poder.
1 de Febrero de 2013
. El que llama la atención es el Partido Sinaloense (PAS), por su determinación de ir solo a la competencia y más que otra cosa, será para probarse a sí mismo hasta dónde trascenderá en la captación de los votos. Con una súper estructura, debido a su reciente nacimiento, de contar con una membresía de 60 mil afiliados, el PAS espera nominar un buen número de candidaturas en los 18 municipios, y cubrir un buen porcentaje -si no es que en su totalidad-, las candidaturas a las diputaciones, con designaciones muy definidas en las posiciones plurinominales al Congreso y Ayuntamientos. Consciente de las condiciones de cómo entrarán a la contienda electoral, el presidente del PAS, Héctor Melesio Cuén Ojeda, manifiesta su confianza de que su partido habrá de atraer a ciudadanos que se interesen por ampliar los espacios democráticos, dándoles oportunidades a marginados por sus propios partidos, sobre todo porque esos son partidos que se empeñan más en reciclar a los que van de un cargo electoral a otro.
A quienes no los tomen en cuenta, en el PAS tendrán esa oportunidad, para
ellos va la invitación de nuestra parte, como la hacemos a los ciudadanos distinguidos con buena fama pública y con ganas de servirle a la sociedad". "Esta es una invitación generalizada que hemos hecho y la seguimos haciendo en todo el estado. Esa es nuestra propuesta ciudadana", manifiesta el exalcalde de Culiacán y exrector de la UAS, la máxima casa de estudios de Sinaloa. Donde prácticamente están definidas de manera virtual dos candidaturas es en el PAN. Sin mucho aventurar en nombres ni posiciones, y ni quien les haga sombra, el diputado Carlos Felton se enfila hacia la Presidencia Municipal de Mazatlán, y el alcalde Alejandro Higuera Osuna, por la diputación local del 19 distrito, incluyendo su nominación por la vía plurinominal. Ésta es una fórmula que representa una verdadera tranca para los aspirantes del resto de los partidos. Tanto Felton como Higuera, en los últimos procesos electorales, han resultado invencibles y su posicionamiento actual los hace ver como los de mayor peso en la competencia de las próximas elecciones.