Juan Pablo Castañón (yoinfluyo.com)

Hoy expresamos nuestra solidaridad y apoyo al pueblo de Venezuela, que sufre una difícil situación por la falta de alimentos básicos y medicamentos. El malestar social parece agravarse al cumplirse justo dos años de la muerte del ex presidente Hugo Chávez.

El desempeño económico de Venezuela se ha deteriorado: al cierre del 2014 la economía se contrajo 4% y la inflación creció 62%; esto lo viven los trabajadores como una realidad en la que su dinero alcanza cada vez menos para satisfacer sus necesidades más elementales.

Gran parte de los 30 millones de venezolanos no tiene en su mesa productos básicos como leche, aceite, café, incluso papel higiénico, mientras que las protestas de amplios sectores de la población reciben como respuesta la represión.

Para Venezuela parecen venir momentos más difíciles, por el impacto de la caída de los precios internacionales del petróleo, mercado en el que el país sudamericano es el octavo mayor productor del mundo.
• Cada disminución de 10 dólares en el precio del barril de petróleo acarrea un deterioro de la balanza comercial de Venezuela del orden de 3.5% de su Producto Interno Bruto, un impacto muchísimo mayor que para cualquier país de la región latinoamericana.

En especial, nuestra solidaridad con los empresarios venezolanos y sus colaboradores en las empresas, que hoy son objeto de una campaña de descrédito, al pretender responsabilizarlos del desabasto de medicamentos y productos básicos.

La Federación Venezolana de Cámaras de Comercio y Producción (FEDECÁMARAS), organismo patronal hermano con el que hemos trabajado en diversos foros empresariales durante muchísimos años, ha denunciado intimidación y acoso, a través de controles, represión e incluso persecución y encarcelamiento.

COPARMEX se suma a la protesta presentada el pasado 4 de marzo por la Organización Internacional de Empleadores y FEDECÁMARAS ante la Organización Internacional del Trabajo y su Comité de Libertad Sindical.
• En esa acción se denunció el reciente asedio del Gobierno de Venezuela al empresariado libre de ese país y ataques a las empresas privadas, muchas de ellas miembros de FEDECÁMARAS.

En esta protesta se precisa que en Venezuela, tan sólo el mes pasado fueron detenidos más de 15 empresarios y directivos de empresas distribuidoras de medicinas y de alimentos y de organizaciones gremiales privadas dedicadas a la atención hospitalaria, al servicio de supermercados y a la distribución de carne.

Ese mismo mes, sin el debido proceso ni respeto al derecho de la defensa, el Gobierno venezolano ocupó una empresa privada distribuidora de alimentos, bajo acusaciones de “conspiración contra el Gobierno”.

La comunidad empresarial internacional no puede permanecer indiferente ante las situaciones de intimidación y acoso como las que está viviendo el sector privado venezolano.

De manera respetuosa a la política nacional de nuestro país hermano, hacemos un llamado al gobierno venezolano a que restablezca el diálogo social sobre la base del respeto, que cese la intimidación hacia las organizaciones empresariales independientes y representativas y a los trabajadores.

Confiamos en que podrán encontrar las mejores soluciones a la crisis, siempre con respeto absoluto de la libertad económica y la propiedad privada.

Con FEDECÁMARAS compartimos la visión de que las empresas y las personas que las integran son el verdadero motor que puede impulsar el crecimiento sostenido de nuestras economías en América Latina y el mundo.

En toda sociedad, las empresas son la manifestación de la creatividad, iniciativa y libertad de las personas para producir no sólo bienes y servicios, sino opciones reales de progreso comunitario en beneficio de toda la sociedad.

Las empresas las formamos personas, empresarios y colaboradores, y juntos generamos el valor que aporta a la sociedad el crecimiento, el desarrollo y las oportunidades.

En Venezuela, como en cualquier país, los empresarios cumplen un rol vital para la economía, impulsando inversiones, innovación y el progreso social para una mejor calidad de vida.

Los empresarios de COPARMEX enviamos un abrazo solidario al pueblo de Venezuela.

Hacemos votos para que puedan recuperar la paz, la concordia y un camino sustentable a la recuperación de su economía y la reconstrucción del tejido social, con la participación de sus empresas y sus empresarios y colaboradores en las mismas, para que en un ambiente de libertad puedan seguir creando oportunidades de desarrollo y de empleo digno para más venezolanos. Es la forma de salir adelante, en armonía.