El Asunto de Fondo: El Caso de la CNTE y otras especies

Columna del 1º. De Abril del 2019

El Asunto de Fondo: El Caso de la CNTE y otras especies

Jorge Miguel Ramírez Pérezjmramirez2019

 

 

El problema no es únicamente la elección por la vías violentas e incivilizadas que usan los de la Coordinadora de los empleados de la Educación, la llamada CNTE, para lograr lo que quieren. Ese método finalmente es parte de la discursiva protocomunista y específicamente la de línea de masas, la ruta de acción favorita de Mao; para asustar a las conciencias temerosas y a los faltos de vocación de gobierno.

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Porque lo que plantean los violentos son actos concatenados que en su conjunto perfilan una provocación escalonada. Una sola. No una serie, como creen los que esperan que si se dan los acuerdos, los seudo maestros puedan cambiar de rumbo y/o actitud. Por eso, argumentar que hay un diálogo, equivale a demostrar que la parte gubernamental, no tiene un diagnóstico preciso y en consecuencia, en vez de pretender un acuerdo, lo que hay es un vacío de estrategia.

Porque sencillamente los que tienen la decisión en este conflicto de amplio desgaste, no son los del gobierno, ni siquiera las fuerzas políticas que integran el Estado; ellos, son sujetos pasivos; no tolerantes, sino paralizados, ante los que hasta ahora mandan y condicionan: los líderes que quieren vehemente desatar la violencia generalizada, que es su medio natural; razón de su cohesión y existencia como grupo beligerante.

Para ellos, abandonar la confrontación es perder el movimiento para siempre y se aferran a las perturbaciones colectivas intransigentes, que tienen raíz en lo que afirmaba el Che Guevara en su paranoica megalomanía, exigir lo absurdo: "pidamos lo imposible".

Y ahí está el origen, el hilo conductor del desastre anunciado; porque obviamente el tema educativo es un pretexto, no un punto de partida; y .... ¿los niños de México?: les importan un bledo. Pedir que asuman los falsos maestros, una responsabilidad que nunca han tenido, que no conocen, ni quieren enterarse que existe; es de lo mas ingenuo.

Los que les dicen "maestros de la coordinadora" son los burócratas y sus adversarios sindicales, porque para la CNTE su interés, jamás ha sido la enseñanza; porque la rechazan con sendos argumentos; uno, que tanto para ellos, y en particular para sus líderes, la educación es "el instrumento del sistema para apuntalar la dominación desde la niñez". Y dos, porque la impronta de la barbarie es lo que si es suyo, y a lo que no quieren renunciar.

Entonces no sirve de nada un diálogo aparente, donde no hay ni habrá voluntad política en una de las partes.

Porque sin la voluntad de los transgresores impunes, no solo es perder el tiempo; sino que al darles un espacio de discusión, se les da un lugar a quienes no lo quieren. Porque no quieren repartos, sino todo el pastel: el poder, ni más ni menos, todo, menos nada.

Y como se les dio plataforma y personalidad de solicitantes de justicia de manera unilateral, y se les cedieron espacios en el Congreso, están crecidos. Ahora se les hace poca cosa el trato con los del gabinete y quieren hablar o mejor dicho jalonear al presidente de México directamente y a todo color. Porque saben que si alguien tiene que ceder es él, porque repito; ellos, no lo van hacer. Esa es su hipótesis operativa central.

Y aunque le parezca a usted mi estimado lector, una locura literal: ellos quieren que en los hechos, el estado mexicano abdique a la rectoría de la educación. Pero a su favor en primer lugar; y de sus interese en segundo lugar. En ese orden.

¿Por qué? Porque no entienden los porros, ni los consejeros del gobierno, ni los comentaristas aún los críticos, que la rectoría del Estado en la educación es lo que está en juego. ¡Eso es lo de fondo!

Ese es el eje sobre el que debe ceñirse el supuesto diálogo: la facultad que tiene el Estado como autoridad irrenunciable e indelegable, como se señala constitucionalmente.

Porque una cosa son los las autoridades a quienes confiere la responsabilidad el Estado para que en su nombre administren la responsabilidad y, otra cosa, los sujetos que el Estado contrata para cumplimentar un servicio. No pueden aunque quieran con mil plantones ser autoridad los sindicalizados. Dos principios se los impiden; bastaría uno, el constitucional; y el segundo, la urgente diferenciación indispensable en todo estado moderno.

Porque la era en la que el brujo era la cabeza de la tribu, el jefe de los guerreros y el agorero al mismo tiempo; era una etapa precivilizatoria, donde los roles sociales estaban amalgamados y el horizonte no despegaba el salvajismo concentrador.

La CNTE ya dio muestras de esas regresiones y van a querer que se diga en la Constitución que la educación en México, compete a las autoridades y....a la Coordinadora y/ o las organizaciones de su especie, para determinar la planeación, el contenido, los cargos, las jerarquías, los sueldos, las plazas, las prestaciones, las vacaciones, los premios y de pasada, la capacidad de veto de las cámaras...

Porque aunque cause risa... eso es lo que quieren para empezar, pactando por escrito o en compromisos inconfesables los acuerdos para reventar el presente y el futuro de México. Porque tal parece que hay un plan para rebajar a los mexicanos y que acabemos dándoles la razón a los que no la usan.

Por lo pronto estamos en el lugar 107 de 135 países del mundo en materia educativa.