La tarde de este lunes, comerciantes del centro histórico de Culiacán, sostuvieron una reunión con autoridades municipales del Ayuntamiento de Culiacán. Ramiro Cruz León director de Obras Públicas y el Arq. Eleviel Zamora coordinador de Proyectos Estratégicos del IMPLAN, encabezando a un grupo de funcionarios, donde destacó la ausencia de la Dirección de Desarrollo Económico, presentó el plano general del proyecto de remodelación y aunque en general fue aceptado por los comerciantes en cuanto a su capacidad para embellecer el sector, la preocupación afloró al tratar las consecuencias que para el comercio significa el cierre de la calle Cristóbal Colón.
En la reunión hubo comerciantes del Mercado Garmendia y de las calles Juárez, Escobedo y Colón, así como de las transversales, Rubí, Carrasco y Morelos. La queja unánime es que las ventas han disminuido, y que la remodelación, con el cierre completo de la calle Colón y sus crices desde Riva Palacio a la Aquiles Serdán (exceptuando la Obregón y probeblemente la Andrade) les causarían un gran daño. La experiencia del año pasado en la calle Escobedo, que fue cerrada de esta misma manera deja esa enseñanza.
Ramiro Cruz señaló que el colapso del tránsito vehicular ya es patente en las calles del centro, incluso antes de cualquier remodelación y mientras no hay ninguna obra, y que aunque esto generará más molestias en el corto plazo, a la larga habrá un beneficio para toda la ciudad y también para los comerciantes.
Por su parte, el Presidente de Centro Vivo Culiacán A.C., Carlos Arturo García, señaló que es necesaria una mayor regulación de los estacionamientos, un reordenamiento del transporte publico y un análisis de los perjuicios que se han causado al comercio en los años que se han implementado remodelaciones a las calles del Centro.
Otros comerciantes llegaron incluso a solicitar que no se llevara a cabo la obra, o se hiciera en etapas con una menor afectación global.