Beijing le declara la guerra a las PM2.5

(Partículas de menos de 2.5 micras). Es evidente que los próximos cinco años se deberá hacer un esfuerzo para mejorar la calidad del aire.

La contaminación del aire en Beijing es producto de las emisiones de los vehículos de motor en cerca del 30%. Beijing ha asumido las 22 iniciativas de gobernanza global. Para 2017, se busca disminuir la flota de vehículos de la ciudad a 6.000.000 o menos, disminuir de manera proporcional los viajes en la ciudad y promovere el uso de autobuses tratando de llegar a 52% de los viajes actuales, lograr la eliminación de 1.000.000 vehículos antiguos, y mejorar los estándares de combustibles, la promoción de vehículos de energias limpias para el transporte público, son algunas de las políticas públicas que se quieren impulsar.