1.- ¿Sueles andar con un look “sonrojado”? Para evitar que resalte el tono rosado de tus mejillas, ocupa un lápiz labial de un color vivo. Si usas un tono neutro, sólo lograrás que tus mejillas se destaquen.
2.- Para utilizar mejor el delineador de labios, antes de ponértelo caliéntalo con la punta de tus dedos, de esta forma se aplicará con mayor facilidad.
3.- Sonríe cada vez que te pongas brillo. Ésta es la manera más segura de que cubras por completo la zona, incluidas las esquinas.
4.- Logra que tus labios estén suaves y lisos retirando, por las noches, los pedazos de piel seca con un paño húmedo y caliente. Después aplícate una capa de bálsamo labial.
5.- Para evitar que el lápiz labial se te desparrame por la boca, ocupa un poco de corrector alrededor de tus labios