La firma del "Pacto por México" entre los principales partidos y el Presidente de la República es un aspecto muy positivo para la transición, se privilegia el diálogo, se establecen las bases para la negociación y se busca el acuerdo para llevar al país hacia niveles de mayor justicia, dignidad y desarrollo. Aunque en sí mismo no representa ningún avance, clarifica la agenda legislativa y esto deberá hacer más eficiente al congreso. Esperemos que los partidos respeten el pacto que firmaron el pasado domingo y tengan siempre la claridad de miras que esto es en beneficio del país.