"Promoviendo la Participación Ciudadana"

sd-05

InicioDIARIO TIPS¡No más peleas entre hermanos!

¡No más peleas entre hermanos!

pelea-hermnosPor Silvia del Valle
@TipsMama5Hijos

Si tienes más de un hijo es común que se peleen por cualquier cosa. No importa la edad que tengan el pleito puede ir desde querer el mismo juguete hasta querer el mismo plato para comer o ver diferente programa en la tv a la misma hora.

Aquí están 5Tips que a mí me han funcionado y que puedes aplicar en tu familia.

PRIMERO: Escoge un color que identifique a cada uno de tus hijos

No necesitan saber leer para ubicar sus cosas ya que al identificar su color saben rápidamente cuales son sus cosas.

Con esta medida yo logré que mis 5 hijos no pelearan por las cosas.

Les compraba sus vasos, sus platos, su toalla, el cepillo de dientes y hasta sus sábanas de cada color. De igual forma con los juguetes trataba que predominara el color del cada uno de ellos.

Si nuestros hijos ya están en edad de escoger, involúcralos para que decidan qué color va a ser el que lo identifique y si no, no tengamos miedo en asignarles su color.

SEGUNDO: Dale un lugar a cada quien para que guarde sus cosas

Puede ser un cajón con su nombre o una caja de plástico pintada o forrada de su color.

Con esto les estamos dando una zona segura para sus cosas y sus hermanos aprenderán a respetar esos lugares.

Además, fomentamos el orden porque sin que se den cuenta, les estamos enseñando que las cosas tienen un lugar y que ahí es donde hay que guardarlas.

Si nuestros hijos ya están grandes podemos asignarles una gaveta en el closet para que pongan ahí lo que es suyo y así ya no tendrán pretextos para justificar que sus cosas anden por toda la casa.

TERCERO: Aplica las mismas reglas para todos

A veces cometemos el error de querer tratar de diferente forma al hijo más grande o al más pequeño.

Las reglas deben ser generales por lo que sí está establecido que hay un castigo para una mala conducta debemos ser parejo y castigarla de la misma manera en todos los casos.

La diferencia debe estar en el tiempo de duración del castigo, de acuerdo con la edad de cada niño. Un minuto por año es lo correcto. Y por favor, ¡no castiguemos a nuestros hijos de acuerdo al estado de ánimo en el que nos encontremos!

También podemos hacer un reglamento de nuestra casa con las 10 reglas básicas de nuestra familia. Yo lo tengo pegado en una pared para que a los niños no les cueste trabajo recordarlo.

De igual manera con los premios, no debemos hacer distinciones y sobre todo, debemos cumplirlos

CUARTO: Enséñales a compartir las cosas y ayúdales estableciendo turnos

Aunque tuviéramos el dinero suficiente para comprar varias piezas de lo mismo, nuestros hijos deben aprender a compartir y a esperar turno.

Lo principal es que jueguen con el mismo juguete y que esperen a que les toque, o que escojan un programa en la televisión y después dejen ver a los otros lo que escogieron, esto fomenta la paciencia y el control de sí mismos.

Los seres humanos normalmente competimos por los bienes que son de dos tipos:

•Los bienes tangibles y por lo tanto limitados, que pueden ir desde un juguete, un auto o el dinero y que con ellos debemos fomentar la prudencia, la caridad y la generosidad.

•Y los bienes intangibles como el amor, un reconocimiento o el honor y con ellos debemos fomentar el servicio a los demás, el compañerismo, la fraternidad y el dominio de sí mismo.

Y QUINTO: Sobre todo enséñalos a decir la verdad

Estoy segura que a todos nos ha pasado que cuando hay un pleito entre hermanos preguntamos ¿quién empezó? y todos dicen que el otro fue. Esto es causado por el temor al regaño o al castigo y no necesariamente por que les guste decir mentiras.

Pero es muy importante que tengan el valor de decir la verdad, que sepan afrontar las consecuencias de sus actos y así estarás ayudándoles a desarrollar el valor de la responsabilidad.

Salir sin castigo a base de mentiras, no trae nada bueno ya que el castigo no es a la persona, es a la acción equivocada.

A mis hijos, cuando se da una situación así les digo que prefiero que me digan la verdad y si lo hacen, algunas veces no los castigo porque me dijeron la verdad. Esto puede ser un estímulo muy bueno para que comprometan siempre con la verdad.

Mejor los hago reflexionar sobre el problema que causaron o el daño que hicieron.

Y lo que terminan haciendo es ofreciendo disculpas o tratando de reparar el daño que causaron.

¡Siempre es mejor la verdad!

Por eso no pasa nada si de vez en cuando, pasamos por alto el castigo. Sólo tenemos que poner los hechos en una balanza y ver que tiene más valor, la falta o haber dicho la verdad.

Al fomentar este tipo de actitudes les ayudamos a entender que No todo lo que quieren lo pueden tener al instante y que las cosas cuesta trabajo obtenerlas.

También les estamos marcando límites que, con los colores que les asignamos, son visualmente claros.

Si queremos hacer un delincuente o un sicario, entonces debemos darle a nuestros hijos todo lo que nos piden, déjalos que peleen y cómprales todo lo que está de moda.

Pero si lo que queremos es tener hijos centrados, debemos tener claro que los límites son necesarios. Y no debemos tener miedo de ponerlos, ¡Papá y mamá somos la AUTORIDAD en la familia!, porque a la larga les estamos educando para la vida.