Pedro de Legarreta

Visita del Papa Francisco a Sudamérica.- La visita del Papa Francisco a tres países de América del Sur ha sido noticia a lo largo de la semana, aunque sin duda uno de los temas que ha acaparado la atención de los medios fue el regalo de mal gusto que le hizo Evo Morales a Su Santidad, un Cristo clavado en la hoz y el martillo, símbolo del comunismo, ideología a la que el presidente boliviano se dice afecto. “No está bien eso”, dijo el Papa ante la explicación de Morales que parece describir el presente como una réplica de una talla que hizo en los ‘70s el sacerdote jesuita español Luis Espinal Camps, asesinado en 1980 por la dictadura, y por quien el Pontífice rezó en el camino que lo condujo del aeropuerto de El Alto hasta La Paz. El pontífice ha sido criticado por tener un discurso muy similar al de la izquierda, sin embargo cabría preguntarse: ¿el discurso de la iglesia es similar al de la izquierda o el de la izquierda es similar al de la iglesia? La respuesta parece dárnosla el mismo Papa en un discurso pronunciado poco después del intercambio de regalos en la Catedral de La Paz: “La fe es una luz que no encandila, las ideologías encandilan, la fe no encandila, la fe es una luz que no obnubila, sino que alumbra y guía con respeto la conciencia y la historia de cada persona y de cada convivencia humana”, indicó. Todavía le quedan varios días a esta gira, y si sus discursos han sido de una profunda riqueza, sin duda los que vienen lo seguirán siendo. Vale la pena leer la información directamente de la página del Vaticano o de alguna de las agencias católicas, ya que estas evitan interpretar con algún lente político la información y nos proporcionan versiones más próximas a la realidad.

El Estado Islámico sigue su guerra cultural.- La directora general de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), Irina Bokova, ha alertado contra lo que ha descrito como una campaña de "limpieza cultural" por parte del grupo terrorista Estado Islámico en Iraq y Siria. Y es que el grupo terrorista ha dinamitado ruinas en Palmira y anuncia que acabará con toda manifestación cultural que no sea islámica, dejando claro que no existe para ellos un espíritu de pluralidad y tolerancia, sino exclusivos y excluyentes, haciendo muy difícil llegar a un acuerdo en el que sea posible la construcción de la paz.

Grecia, ante el rescate y el precipicio.- Decía Einstein que locura es hacer lo mismo una y otra vez y esperar resultados diferentes. El pueblo griego no está loco y por eso rompió con el bipartidismo que lo gobernó durante 50 años y eligió a Tsipras para intentar una vía diferente. A pesar de la extraordinaria complejidad de la negociación actual, llena de desinformaciones interesadas, sí se pueden establecer los puntos que marcan el terreno de un acuerdo tan necesario como posible. Primero, hay que liberar a la economía griega de la pesada losa del servicio de su deuda -devolución de préstamos y pago de intereses- que impide su crecimiento. Para eso habría que considerar una reestructuración de su deuda, incluyendo una moratoria temporal hasta que su economía vuelva a crecer. No se trata de permitir que incumplan el pago de la deuda, sino de darles la posibilidad de pagarla.