Alejandra Diener
Cuando hay un vacío de poder, ya sea en política o en cualquier gremio, en este caso en las bandas de narcotraficantes, entonces es cuando las bandas luchan entre sí para ver quién consigue el poder; y esto es una realidad: cuando hay ese vacío, alguien busca llenarlo.
Seguimos hablando del libro de Johann Hari, "Tras el grito", un libro que nos habla de la historia, de la lucha en contra de las drogas desde los años 20, desde los años en que hubo la prohibición del alcohol. Hace un análisis de cuando se volvió a permitir el alcohol. Cuando se legalizó, se gravó, se incrementaron sus impuestos y se permitió su consumo. Las mafias dejaron de tener ocupación, la policía dejó de tener trabajo, dejaron de perseguir, porque no había delito que perseguir.
Entonces, se dice por ahí que un hombre llamado Harry Anslinger, dijo que había que perseguir a los narcotraficantes, y ahora los consumidores de drogas que antes eran considerados adictos y que tenían que rehabilitarse, hoy en día son los que cometen el delito.
Entonces, hablando un poco de ello, vemos que hay estudios y que hay investigación que hace este periodista Johann Hari, que yo los invito a leer, para ver si en realidad la prohibición es la que nos conviene, porque resulta que cada vez que arrestan a un capo, salen más capos y se incrementan los asesinatos. Entonces, ¿en realidad está funcionando esta guerra contra el narcotráfico a nivel mundial?
Nos dicen que en un estudio realizado por el profesor Jeffrey Miron, de la Universidad de Harvard, se ha comprobado que en las tasas de asesinatos, este análisis estadístico nos muestra de manera sistemática que el incremento en las operaciones policiales contra los traficante va ligado a un incremento paralelo en la tasa de homicidios, y eso sucede aunque tomemos en cuenta algunos factores adicionales. Por más que se intente reducir el número de asesinatos mediante un trabajo de policías, agentes especializados, de grupos creados para perseguir a todos éstos, en realidad se contribuye a su incremento, según estos estudios.
Por eso es importante que nos detengamos a pensar: ¿Queremos detener esta guerra tan atroz que vive día con día la ciudadanía de todos los países, porque ya no solamente es de México? ¿En realidad seguir prohibiéndola y persiguiéndolos ha dado resultados? ¿Luchar en contra de las drogas era combatir a las bandas de traficantes que habían asesinado a quienes tiene que ver con los agentes y policías de todas las épocas?
Y la "ley seca". Se decía en ese entonces que la violencia estaba asociada a las sustancias ilícitas. Cuando se paró todo esto, solamente cuando se fue regularizando y legalizando el tráfico de las mismas. Ahora, ¿puede resultar también en el caso de las drogas fuertes como el opio, el crac, la cocaína, la mariguana?
Estamos hablando de políticas públicas no de consumo en sí.
Se los dejo a reflexión y los invito a leer el libro. Seguiremos platicando sobre la guerra en contra de las drogas.