Hace cuatro meses, el representante del PT en el Congreso del Estado presentó una propuesta para que los legisladores no se pudieran ir en tropel, sino despacito, de diez en diez… ni siquiera eso prosperó.
El día de ayer, el Parlamento Ciudadano, México Digno, Coparmex y Colegios de Abogados realizaron un Foro de Análisis Pro Ley Antichapulín, el discurso de los partidos políticos fue halagüeño, o tal vez solo atole con el dedo, pero todos coincidieron en que no es ético abandonar el puesto para el que fueron electos democráticamente.
Desafortunadamente la ley no contempla una forma en que este fenómeno se pueda restringir, mucho menos eliminar. Por supuesto, hay que trabajar en los mecanismos que lo hicieran posible, pero surgen algunas dudas: ¿se puede restringir un derecho a los falsos servidores públicos, sin que esto afecte a los buenos funcionarios?, ¿no estaremos impulsando una trampa que impida a quienes tienen un comportamiento ético seguir sirviendo a la sociedad?
Imagine usted a un funcionario público modelo, un diputado o alcalde que haga las cosas muy bien, generando bienestar para la sociedad, impulsando el desarrollo, creando condiciones de justicia y respetando la ley, ¿no quisiera usted que ese servidor público siguiera en su puesto?
Por otra parte, lo normal, gente que abusa del poder, que se enriquece a costa de los impuestos, que se sirve de la ciudadanía y de los cargos que desempeña ¿no deberíamos botarlo a la calle y no votarlo en la casilla?
Entonces, ¿es un asunto de leyes o de cultura ciudadana?
Creo que mientras más profundicemos en el tema, más evidente será que es necesario que crezcamos como ciudadanos, nos responsabilicemos de nuestras decisiones y hagamos conciencia de nuestro poder como electores. Es hora de que dejemos de preocuparnos por lo que partidos y políticos hacen y deshacen en sus carreras y que seamos conscientes de que en la medida que apoyemos o dejemos de hacerlo el día de las elecciones a un candidato y a un partido político, en esa medida los que toman las decisiones buscarán estar más cerca de nosotros o no, mientras sigamos votando por costumbre o por el color que nos gusta, las cosas no van a cambiar.