Si acaso se le puede llamar de esa manera.
El dirigente estatal del PAN, Edgardo Burgos, se limitó a decir que estaba mal, que eso no se debe hacer, que por favor aclare la situación. Madero ni siquiera se dignó mencionar el asunto, como si no hubiera ocurrido.
Y como si se tratara de un proceso judicial pide que se deslinden responsabilidades y se haga justicia, pero ¿qué justicia se podrá hacer si, a pesar de haber sido visto por cientos de personas y denunciado públicamente a través de las redes sociales, a pesar de haber sido detenido por las fuerzas de seguridad del aeropuerto e impedido a abordar por su inconveniente estado y su manifiesta violencia, el dizque hombre sigue siendo diputado y se conforma con decir “son rumores infundados”?
Pedro Ferriz le preguntó que si lo negaba, no contestó, decenas de usuarios de twitter lo interpelaron, a nadie le dijo nunca que no lo hizo. Jorge Villalobos Seañez apuesta al olvido y la impunidad, eso sí, no pierde la oportunidad de rechazar la violencia de género colgándose un listón naranja y decir que México no puede permitir más impunidad (excepto la suya ha de querer decir).
Señor Villalobos, quítese el listón y discúlpese públicamente con su mujer, renuncie a su cargo de Delegado del CEN en Sinaloa y pida licencia en el Congreso, porque sus compadres no lo van a sancionar, le van a permitir salirse con la suya, pero lo que está logrando es causarle mucho daño a México y a Sinaloa.
Lamentablemente estas palabras caerán en oídos sordos, el diputado no hará nada, la dirigencia del partido no hará nada, pero la ciudadanía que nos hace favor de leer estas líneas recordará esto en el próximo proceso electoral, entonces desearán haber actuado, entonces conocerán el rechazo de la población… entonces será demasiado tarde para hacer justicia.