Decimos que algo es democrático cuando está al alcance de todos, y lamentablemente la inseguridad en nuestra ciudad y nuestro país está consiguiendo esta calificación nada deseable.
El día de hoy tenía pensado escribir sobre otro tema, sin embargo el descubrir que a un diputado local le robaron su vehículo a mano armada es sin duda preocupante, aunque por otra parte permitirá una mayor sensibilización de los servidores públicos en este tema para que le pongan más atención.
Apenas el sábado me tocó ver como intentaban robar el vehículo a unas señoras, a las 3 de la tarde en la Colonia Chapultepec, me detuve para tratar de ayudar pero como además de rateros eran incompetentes, no pudieron echar a andar el vehículo y cuando me acercaba al lugar de los hechos los vi bajar del auto y noté tremendo bulto en uno de los costados del asaltante, lo que me llenó de miedo y preferí dar la vuelta y huir del lugar antes de convertirme en víctima.
Si los delincuentes pueden realizar estas acciones impunemente, a pleno día en zonas concurridas de la ciudad sin que una patrulla sea capaz de responder rápidamente al hecho, si puede pasarle esto a un diputado, miembro de la mesa directiva del Congreso, ¿qué puede esperar el resto de la población?, la que vive en zonas marginales, la que no tiene relaciones políticas que le ayuden, ¿se darán cuenta nuestras autoridades del terrible clima de miedo en que viven nuestros conciudadanos? O ¿a pesar de saberlo les tiene sin cuidado?
Ciertamente han disminuido el robo de unidades, según el Secretario de Seguridad Pública se ha pasado de 27 unidades diarias a solo(?) 16 vehículos robados por día, el problema es que la mitad son robadas con violencia, lo que además del daño económico, genera un daño al menos emocional cuando no físico e incluso llegando a la muerte de las víctimas.
Eso ubica a Sinaloa con aproximadamente 210 vehículos robados por cada 100,000 habitantes en el año, por ejemplo la ciudad de Nueva York tiene un índice de 122 vehículos robados anualmente por cada 100,000 habitantes.
El robo de vehículo es uno de los crímenes patrimoniales que más llaman la atención de la sociedad, dado que tiene una amplia ocurrencia y el auto es una herramienta que se utiliza de manera cotidiana en nuestras vidas, por lo que ser despojado de él tiene profundos efectos en la vida diaria y en la economía de las familias, especialmente en la clase media.
Esperemos que el robo del que fue objeto el diputado haya sido algo meramente circunstancial, como el lo piensa, y no un acto deliberado y premeditado por parte de la delincuencia organizada; como sea, es fundamental que para empezar este caso sea resuelto y atrapados los delincuentes, ya que el mensaje, de lo contrario, es que pueden hacer lo que quieran y a quien quieran. Esperemos que nuestras autoridades resuelvan el asunto a la brevedad.