Tips del 3 de abril de 2022
Celebremos la Pascua en familia
Por Silvia del Valle
Ya hemos dicho que la Pascua es la fiesta mayor para nosotros los católicos. Celebramos que Jesús venció a la muerte y nos ganó así, la vida eterna. Esto es el fundamento de nuestra fe y por eso debemos celebrarlo en grande por eso aquí te dejo mis 5Tips para lograrlo.
PRIMERO. La Pascua son 50 días.
Debemos tener claro que la Pascua comienza el domingo de Resurrección pero se extiende durante 50 días, es por esto que debemos estar alegres durante estos días. No quiere decir que no tengamos problemas o contratiempos, sino que los afrontemos con alegría y una actitud positiva para dar testimonio de lo que Cristo ha hecho por nosotros.
Ningún problema es más grande que la muerte y Jesús la venció, así que nos puede ayudar en cualquier circunstancia, siempre y cuando nosotros nos dispongamos para recibir su ayuda.
Vivamos una pascua con optimismo, Esperanza, Fe y Caridad.
SEGUNDO. Haz un plan familiar para celebrarla.
Como es tanto tiempo, es necesario que hagamos un plan familiar para, primero, explicar a todos lo que es la Pascua, después para asegurarnos que la vamos a vivir con una buena actitud y también para preparar actividades que nos permitan convivir y vivirla intensamente.
Este plan puede contener actividades como, lecturas de la Biblia, dibujos, juegos de mesa, visitas a templos, museos, parques, rallys, comidas o cenas familiares y actividades encaminadas a compartir esta alegría con los demás como visitas a algún asilo, orfanato, casa hogar, comedor parroquial, etc. la idea es compartir con caridad, lo que Dios nos da con generosidad.
Para los niños pequeños podemos buscar material didáctico que nos ayude a explicarles con claridad y sencillez lo que es la Pascua, así podrán también vivir acorde a su edad esta gran fiesta.
TERCERO. Comparte con los que te rodean esta alegría.
Como es un gran acontecimiento, es importante que nuestro ambiente familiar sea coherente.
A nuestras celebraciones podemos invitar nuestra familia extendida y algunos amigos para compartir nuestra alegría y aprovechar para tener un rato de sana convivencia. No es necesario gastar mucho, con algo sencillo pero bonito basta, algo que nos haga ver que es un tiempo especial.
Pero recuerda, el centro de la celebración siempre tiene que ser Jesús resucitado.
CUARTO. Busca que la celebración no se quede en lo superficial.
Adema de lo exterior, es necesario que haya fiesta en nuestro interior, es decir que busquemos mantenernos en un estado de gracia constante, evitando las faltas y cometer pecados que nos alejen de Jesús en esta gran fiesta.
Como somos humanos y somos débiles, siempre tememos el sacramento de loa reconciliación para ayudarnos a corregir nuestros errores. No dudemos en acudir a recibirlo lo antes posible.
Otra forma es comenzar alguna devoción familiar, como la coronilla de la misericordia, el peso del Santo Rosario, etc. o apostolado personal, para esto podemos acudir a la parroquia y conocer las opciones que tenemos a la mano.
Y QUINTO. Que se note que estamos de fiesta.
Es importante que nuestra actitud sea también coherente con lo que estamos viviendo. Es así que no podemos vivir peleando, enojados por todos, refunfuñando por lo que nos piden, etc.
Seria muy bueno que podamos hacer todo con amor y alegría, poniendo todo lo que esté de nosotros para que salgan bien las cosas, y si no salen, poniendo una sonrisa y ofreciéndolo a Dios en agradecimiento a lo que ha hecho por nosotros.
Si a Jesús resucitó y no se vengó de los que lo crucificaron, nosotros ¿por qué no actuamos igual que Él.?
Tips del 6 de abril de 2022
La conversión del corazón, camino de salvación
Por Silvia del Valle
Este tiempo de cuaresma es el tiempo por excelencia para trabajar en la conversión de nuestro corazón y tenemos una oportunidad de oro en esta recta final para lograr cambiar lo que nos pesa, lo que nos aleja del camino que Jesús nos ha marcado como camino de salvación.
En cierto sentido es como hacer limpieza de la casa, que es nuestro corazón y resanarlo para que este digno para que Jesús pueda habitar en él, por eso hoy te dejo mis 5Tips para lograrlo.
PRIMERO. Haz una revisión general para saber en que estado estamos.
Es tiempo para hacer un examen de conciencia profundo, ubicar lo que debemos cambiar, lo que debemos lavar, lo que nos hace sentir mal, lo que sabemos que le ofende a Dios, nuestros defectos y afectos, nuestras debilidades y pecados recurrentes; de esta forma tendremos claros los pasos que debemos dar para lograr tener nuestro corazón digno y a tiempo para vivir la Semana Santa y después la gran fiesta de la Pascua.
Podemos hacerlo revisando mandamiento por mandamiento para ver en que hemos fallado o lo podemos hacer recordando todo aquenio que sentimos que nos aleja de Dios y que nos lleva por el camino del desamor, es decir que evita que tengamos una relación intima con Dios.
Ahora, hasta hay aplicaciones que te ayudan o que te sirven de guía para hacer este examen de conciencia.
Nuestros hijos también lo deben hacer para que aprendan y lo tomen como un estilo de vida. Y son muy pequeños, es muy bueno que comiencen a darle cuenta de lo que han hecho con mala intensión y lo que, a pesar de que saben que va a lastimar la los que los rodean, han realizado con gusto y a propósito.
SEGUNDO. Pide perdón y perdona.
Llega el tiempo de sacudir la casa para poder ver lo que está mas profundo y poder trabajar en eso.
Pedir perdón y perdonar nos capacitan para dar un paso mas y tratar de convertir el corazón.
Para realizarlo es necesario hacer uso de la humildad, que nos permite reconocernos débiles y limitados por lo que nos equivocamos muy seguido y lastimamos a los que nos rodean, aun sin tener la intención de hacerlo, aunque muchas veces lo sabemos y aun así preferimos salirnos con la nuestra.
El que pide perdón se beneficia, pero el que otorga el perdón se beneficia más pues con este sencillo acto suelta amarras que le esclavizaban y se vuelve más libre para convertir su corazón a Dios.
Con nuestros hijos podemos educarlos para que pidan perdón y perdonen de inmediato, justo cuando cometen la falta, de esa forma será mas sencillo que aprendan a reconocer cuando hacen mal y hay que pedir perdón y no les costara trabajo otorgar el perdón pues sabrán que todos nos equivocamos y que es normal corregir.
TERCERO. Limpia tu corazón por medio de la confesión.
Después de la limpieza superficial, vienen los arreglos profundos, esos que requieren de la mano del maestro, del sacramento de la reconciliación por medio de la confesión.
Así es más fácil porque ya hemos hecho un examen de conciencia y sabemos cuales son nuestras faltas y pecados que debemos confesar. Si es necesario podemos llevarlos anotados para que la confesión sea mejor y mas sencilla.
CUARTO. Debemos tener propósito de enmienda.
Ahora viene el tiempo de resanar las grietas que han quedado, es decir, es el tiempo de reparar lo que hemos dañado, lo que hace falta para que nuestro corazón esté reluciente para ser digno de Jesús.
Se que a veces es muy difícil dejar los vicios que por años hemos tenido, corregir errores que creíamos que eran verdades de vida, sanar herida que tienen mucho tiempo en nuestro corazón pero lo importante es que hagamos es esfuerzo por corregirlo.
Dios ve nuestros esfuerzos y nos da la gracia para trabajar y lograr hacer esa conversión de nuestro corazón porque sabe que somos limitados y necesitamos de Él para lograrlo.
Nuestro hijos pequeños que aun no pueden confesarse, también deben aprender a reparar las faltas o errores que comente para que así cuando puedan recibir el sacramento de la confesión le sea más sencillo tener un firme y real propósito de enmienda.
Y QUINTO. Busca nuevas rutas para regresar al camino que Jesús nos marca.
Por último, la conversión del corazón nos exige hacer cambios radicales en nuestro estilo de vida. Dejar de frecuentar los lugares o las personas que nos hacen daño y nos alejan de Dios, dejar de realizar actos que nos lastiman y lastiman a los demás, buscar estrategias para hacer el mayor bien posible, etc.
Llega el momento de trabajar y ofrecer nuestros esfuerzos para el bien de nuestra alma, de nuestra familia y de la sociedad en que vivimos.
Buscar nuevas rutas implica emprender nuevos caminos y estilos de vida y en estos días que aun nos quedan de cuaresma podemos tomar las decisiones necesarias para retomar la ruta, el camino adecuado para acompañar a Jesús en su caminar para alcanzarnos la salvación eterna.
Nuestro testimonio es importante para que nuestros hijos aprendan este proceso de la conversión del corazón y ellos también puedan realizarlo en sus propias vidas.
Tips del 30 de marzo de 2022
En el dolor siempre hay un guiño de gozo
Por Silvia Del Valle
Nuestra vida esta marcada por el dolor y el gozo, que son sentimientos que parecen opuestos, pero que en realizad pueden ser complementarios ya que después de un gran dolor, Dios nos concede un guiño de gozo y paz.
El mundo se convulsiona por el dolor que nos causa la guerra y la violencia que aqueja a nuestros pueblos y a nosotros nos es difícil encontrar ese guiño de gozo, pero debemos estar atentos y con el corazón dispuesto a recibirlo por medio de los acontecimientos cotidianos. Pero, ¿qué gozo nos puede traer la guerra? Por lo pronto, el de unirnos en oración para consagrar a esos pueblos en guerra y al mundo entero al Inmaculado Corazón de María.
El cuarto domingo de cuaresma, Laetare o de la alegría, nos lo recuerda ya que la liturgia nos dice: Alégrate, oh Jerusalem, porque ya viene tu salvación.
Debemos tener claro que el gozo no siempre es inmediato, a veces es necesario padecer mucho para obtener un gozo mayor de cada situación.
Lo importante es que nosotros sepamos darle un sentido trascendente al dolor ofreciéndolo a Dios, uniéndolo a su pasión y cruz, así logramos que tenga una dimensión corredentora, por eso aquí te dejo mis 5tips para enseñarle a nuestros hijo a ver la alegría en el dolor.
PRIMERO. Que aprendan a ofrecer los pequeños dolores cotidianos.
La sociedad nos invita a la cultura del descarte donde lo que no sirve o no nos gusta lo debemos tirar a la basura; pero en la realidad las cosas no son así.
En nuestras familias, debemos generar un cambio cultural y regresar a aceptar las pruebas y el dolor con alegría, sabiendo que si lo ofrecemos puede traer grandes beneficios a nosotros y a nuestra familia.
Para ofrecerlos solo es necesario que hagan una pequeña oración diciéndole a Dios que tome su dolor y lo una al que sufrió Él en la cruz.
SEGUNDO. Que sepan ser empáticos con el dolor del prójimo.
Cuando quien está sufriendo no somos nosotros sino nuestro hermano, mamá o papá, a veces nos cuesta trabajo comprenderlo y queremos que todo suceda normalmente, pero es necesario enseñar a nuestros hijos a que cuando alguien mas sufre podemos sufrir con él y hacerle más llevadero ese dolor.
No me refiero a provocarnos a nosotros el mismo dolor que el de prójimo, sino que podemos ponernos en sus zapatos y tratar de sentir lo que ellos sienten para ser prudentes, para tratar de hacerle menos pesado ese dolor y buscar hacerle la vida fácil en la medida de nuestras posibilidades.
Esto lo podemos practicar cuando alguien de la familia esta sufriendo y dejando que nuestros hijos les hagan cartitas, dibujos, detalles y hasta que los cuiden un ratito, claro, siempre de acuerdo a su madurez y edad.
A veces un abrazo sana más que todas las medicinas del mundo.
TERCERO. Que practiquen la paciencia cuando hay dolor.
Ya sea que quienes sufren sean ellos o que alguien más, la paciencia debe ser la virtud primordial, ya que cuando hay mucho dolor las formas de comportarse se modifican y nos volvemos bruscos y poco tolerantes.
Es necesario ir entrenando nuestra voluntad para lograr que no sea modificada por el dolor o el gozo extremos y para eso debemos auxiliarnos de la paciencia.
Las obras de misericordia nos lo recuerdan al pedirnos que suframos con paciencia los defectos de los demás y que cuidemos a los enfermos.
CUARTO. Que el dolor no sea un estado de vida.
Una de mis hijas me dijo que es muy fácil caer en un estado de ánimo depresivo cuando hay dolor o sufrimiento en nuestra vida y que debemos contrarrestarlo a toda costa ya que no podemos permitir que se vuelva un estilo de vida, donde nos volvemos víctimas de ser dolor o sufrimiento.
Es necesario vivir alegres y encontrar el lado bueno de cada circunstancia por mas dolorosa que sea, así cambiará nuestra mentalidad y podremos ver esos guiños de gozo que Dios nos manda en medio del dolor.
Esto no quiere decir que no haya momentos de tristeza o de dolor extremos, pero que no sean los que determinen nuestra vida porque mientras tengamos vida, debemos estar alegres por ese gran don.
Y QUINTO. Que el dolor nos lleve a la oración.
En todo morenito y circunstancia debemos acudir a la oración, a ese dialogo intimo con Dios para poder soportar con paciencia y alegría las pruebas, a veces difíciles y otras no tanto.
La oración nos permite ofrecer lo que estamos viviendo y sintiendo y también nos deja escuchar la voz de Dios para comprender por qué o para qué estamos pasando por esa situación dolorosa y así, poder ofrecerla con amor a Dios.
Un pensamiento, una frase sencilla, una jaculatoria son suficientes para comenzar nuestra oración que después podemos hacer todo un estilo de vida y que además podemos educar a nuestros hijos conforme a él.
Hoy levanto una oración para que en cada circunstancia dolorosa que se presente en tu vida, puedas siempre encontrar ese guiño de gozo con el que Dios te acaricia para que siempre seas feliz, con esa alegría que dura porque está basada en Dios.
Tips del 23 de marzo de 2022
San José, modelo de padre y protector de nuestra familia
Por Silvia del Valle
En este tiempo difícil que nos ha tocado vivir tenemos algunos auxilios divinos para ayudarnos a que nuestra familia vaya por buen camino y uno de ellos es San José, modelo de padre y gran protector de la Iglesia y de la familia.
Es bueno que en nuestra familia esté presente y que le conozcamos para tenerlo cercano y adoptarlo como patrono nuestro, por eso aquí te dejo mis 5Tips para que San José tenga un lugar especial en nuestra vida familiar.
PRIMERO. Si aun no la tienes, coloca una imagen de San José en tu altar familiar.
Es importante para que nuestros hijos pequeños lo tengan presente y para que nosotros nos acordemos de recurrir a el a lo largo de nuestro día.
Existen muy diferentes imágenes de el, así que puede ser una cargando al Niño Jesús o también puede ser dormido porque es muy significativo que él escuchara la voz de Dios y conocía cuál era su voluntad en los sueños.
SEGUNDO. Conozcan las Virtudes de San José y aplíquenlas en familia.
Las virtudes son esos hábitos buenos que caracterizan a alguien y que pueden compartir con los demás y seguir su ejemplo para adaptarlos a tu propia vida, por lo que es muy bueno conocer las de San José.
Entre otras están la paciencia, la mansedumbre, la amabilidad, la ternura, la obediencia, la acogida y calidez, la valentía, la creatividad, el silencio y principalmente el trabajo.
Principalmente es necesario que papá las tome como ejemplo, pero también el resto de la familia y para eso podemos ir conociendo sus virtudes y adoptar una por mes para vivirla en familia.
De ser necesario hagamos material para que nuestros hijos pequeños estén incluidos en esta vivencia de virtudes.
TERCERO. Hagan o renueven su consagración a San José.
Consagrar es dedicar voluntariamente a Dios y lo podemos hacer de manera personal y también familiarmente. También podemos hacerlo para ponerse bajo la protección y cuidados de un santo en particular, pudiendo pedir su auxilio e intercesión en las diferentes situaciones y eventos de nuestra vida.
Puede ser tan sencillo como hacer una oración personal, o podemos hacer toda una preparación de varios días, existen varias consagraciones ya establecidas que podemos adoptar.
Siempre es mejor que todos los miembros de la familia participen en esta consagración pero si no es posible, podemos comenzar con algunos y de corazón consagrar a la familia completa.
CUARTO. Adopten una oración a San José para encomendar la familia.
Hay muchas devociones a San José, están los dolores y gozos, está el Rosario y las jaculatorias, dedicar algunos domingos y las novenas.
Cualquier devoción es buena siempre que nos permita acercarnos a San José y que el nos lleve a Jesús.
Podemos comenzar en cualquier momento y podemos adoptar una y después de un tiempo otra de tal forma que nuestra vida familiar esté bajo la protección y cuidado de San José.
Y QUINTO. Vuelvan a leer Patris Corde ,Con corazón de Padre, para seguir conociendo a San José.
Esta carta que el Papa Francisco nos regaló con motivo del 150 Aniversario de tener a San José como patrono universal de la Iglesia, nos puede ser de utilidad ya que en ella se van poniendo de manifiesto sus virtudes y como es que las llevaba a la vida cotidiana.
Puede ser una guía practica y sencilla para comenzar a conocer a San José.
Hay otros documentos que también pueden ayudarnos como la exhortación apostólica Redemptoris Custos de San Juan Pablo II.
De San José se conoce poco y no se tiene referencia bíblica de alguna palabra suya, pero es un gran modelo de padre y protector de la Sagrada Familia, digno de ser imitado por los padres de familia de nuestros días.