Por Silvia del Valle
@TipsMama5Hijos
En estos días donde la violencia y los malos tratos de parte de los compañeros y algunos maestros atacan constantemente la autoestima de nuestros hijos, es necesario que nosotros tomemos cartas en el asunto.
Aquí están 5 tips sobre este importante tema.
P R I M E R O . A y ú d a l o s a c o n o c e r s e .
Nadie ama lo que no conoce y si no nos amamos a nosotros mismos, no podemos poner una barrera ante las críticas y burlas de los demás.
Nuestros hijos se van conociendo poco a poco y de una manera realista, debemos ayudarlos a descubrir sus cualidades en diferentes ámbitos. Y una excelente forma es que se los digamos claramente: “¡Eres un niño muy obediente!”, “¡Que niña tan inteligente!”, “¡Hijo, tú si sabes escuchar!”, etc.
S E G U N D O . V a l o r a s u s l o g r o s
Con realismo y sin exagerar, manifestemos palabras de aliento para festejar los pequeños o grandes logros que van teniendo nuestros hijos.
Los logros pueden ir desde dar los primeros pasos, dejarse de hacer pipí, leer sus primeras palabras, hasta terminar satisfactoriamente alguna tarea difícil.
Yo lo que hago es que tengo 15 minutos de junta familiar donde cada uno de mis hijos nos dice que fue lo que aprendió y los logros que tuvo en el día. Así los estoy ayudando a que ellos mismos valoren sus logros y la familia los estimule y reconozca.
Este tiempo busca ser un espacio de reconocimiento y no de corrección porque de éstos últimos está lleno el día.
T E R C E R O : E v i t a e t i q u e t a r l o s
Tenemos que evitar este tipo de definiciones sobre nuestros hijos desde el principio, porque de alguna manera les crea expectativas y después ellos tratan de llenarlas a como dé lugar, aunque sea de manera inconsciente.
Se dio el caso de un niño que hasta los cinco años seguía creyendo que su nombre era “no” porque su mamá lo único que le decía era “no hagas esto, no te subas ahí”…
Por lo tanto “tonto”, “inquieto”, “desordenado”, “burro”, “vago”, “inmaduro” y “mentiroso” quedan fuera de nuestro vocabulario como papás.
En su lugar podemos decirle que está actuando de esa manera. Por ejemplo, “estas actuando de forma torpe” o “estás actuando como un vago” así entenderá que lo que estás criticando es su actitud y no su persona.
C U A R T O : C o r r i g e c o n a m o r
En la educación de nuestros hijos hay que regañar, corregir e indicar lo que se hace mal. Sin embargo, hay que evitar las críticas destructivas y sobre todo en público.
Con mis hijos busco llevarlos a un lugar apartado de los demás y ahí les hago reflexionar sobre lo que pasó y les ayudo a que se den cuenta de su error y después les digo como pueden corregirlo. Al final ellos escogen como van a reparar el mal comportamiento.
Y Q U I N T O : A c o s t ú m b r a l o s a q u e t o m e n d e c i s i o n e s
¿Por qué no dejamos a nuestros hijos que tomen sus decisiones?
Casi siempre es porque tenemos miedo a que fracasen y en los tiempos actuales la sociedad nos presenta una cultura donde el menor esfuerzo es lo que reina.
Así entramos en esa dinámica y nosotros, sus padres decretamos que nuestros hijos no están en edad de decidir.
Desde pequeños podemos dejarlos tomar decisiones.
¿Cómo? Si les ofrecemos dos sabores de yogurt, dos prendas para vestirse, dos juguetes… la clave es que después afronten las consecuencias y no les cambiemos a la segunda opción si al final su elección no les gusta. Deben acostumbrarse a ser responsables por lo que decidan.
Este tema es muy amplio y hay muchas otras cosas que podemos hacer para que nuestros hijos tengan una autoestima alta y fuerte, así que reflexionemos sobre estos puntos y en el siguiente capítulo les voy a dar los siguientes 5 tips para lograr esta difícil tarea.
Arturo Cuevas Martínez
@elARTUvis
Alguna vez cuando aún me encontraba estudiando la licenciatura, hubo un maestro que emocionado comentó que pensáramos en completar el ciclo del aprendizaje, y la mejor manera de hacerlo desde su punto de vista era dando clases.
De entonces a hoy han pasado ya muchos años, la vida profesional da muchas vueltas, y sin planearlo hace algún tiempo tuve la oportunidad de iniciar mi labor docente.
Al principio, para ser honesto, cuesta un poco de trabajo pues no estas acostumbrado a estudiar a diario y a preparar las clases. Siempre pensé evitar convertirme en ese tipo de Maestro que reparte los temas y se sienta a escuchar las exposiciones de los alumnos, ése que intolerante golpea el escritorio y arrulla con su voz, el que serio y solemne cree que todo lo sabe o que las cosas deben ser como le parece mejor. Creo mas bien en el aprendizaje como una actividad diaria y lúdica, donde de manera natural nos interesemos en los temas y despertemos la curiosidad en nuestros alumnos.
He aprendido que el maestro es una persona que debe estar estudiando constantemente, actualizando sus conocimientos y aprendiendo nuevas tendencias. Debe también adaptarse rápidamente a las modificaciones tecnológicas y estar en medida de lo posible a la vanguardia para utilizar el mayor número de herramientas que mejoren la experiencia de aprendizaje, adaptarse al lenguaje, a la manera como hablan sus alumnos y también a expresar de la manera mas sencilla y clara sus ideas y conceptos.
Enseñar parte de aprender, es decir, una vez que tienes la disposición de compartir tus conocimiento o experiencias también debes estar dispuesto a aprender de las experiencias de los demás, pues el profesor también aprende y mucho, de sus alumnos; enseñar es humildad para reconocer que no lo sabes todo, pero que lo puedes investigar, que te puedes equivocar.
Hoy sé que enseñar es compartir tu vida y dejar que te compartan también su vida tus alumnos, sé que es tener por un breve período la posibilidad de dejar huella en las personas, de sembrar semillas que germinarán con el tiempo y con el paso de los años. Semillas de curiosidad, de gusto por la lectura y por la música, de ser mejor persona, de entender que el cambio empieza en nosotros, de asumir la responsabilidad de nuestros actos y un largo etcétera.
Hoy sé que enseñar es una vocación, sé que enseñar se disfruta aún mas que aprender, sé que es una gran responsabilidad pero nada se compara con el rostro de un alumno cuando con agradecimiento te da la mano al final de la clase, cuando con curiosidad se acercan a preguntarte sobre diversos temas y escuchan tu opinión e incluso la rebaten.
Lo mas importante que he aprendido en este tiempo y espero aprender muchas cosas mas, es que enseñar no te hace sabio, enseñar te hace ser mejor persona, y compartir no te quita experiencia, te da vida.
Por Silvia del Valle
@TipsMama5Hijos
En ésta sociedad que nos hace caminar aceleradamente y con 5 hijos que atender tuve que buscar la forma de hacerme un poco más fácil el proceso de cocinar por lo que he incursionado en el fascinante mundo de las microondas.
Por eso aquí les comparto 5 tips para que aprovechen al máximo su horno de microondas.
PRIMERO. Conoce tu horno de microondas.
No todos los hornos son iguales, así que te recomiendo que te des el tiempo de conocerlo.
Procura leer el instructivo para que estés segura de las funciones que tiene y sus capacidades.
Yo no sabía, pero mi hija investigó que un microondas normal a potencia 100% es equivalente a un horno convencional a 220ºC.
Algunos hornos traen la función de dorado, esta función es muy útil pero debemos tener mucho cuidado ya que para usarla los materiales deben ser diferentes.
Algunos traen funciones rápidas que vale la pena que aprendas a usar así como regular su potencia.
Es importante saber como limpiarlo porque si lo usas sucio gastas más energía.
SEGUNDO. Aprende a diferenciar que material si puedes meter al microondas.
No todos los materiales son adecuados para usarlos en el micro.
Hay recipientes de plástico o silicón especiales para cocinar en el microondas, son muy económicos y prácticos. También los de vidrio, y algunas cerámicas puedes usarlos siempre que no tengan adornos metálicos ya que éstos pueden causar flamas y daña el horno.
Yo lo que hago para saber si el recipiente es apto, es calentar una el equivalente a una taza mediana de agua a temperatura máxima por un minuto y si el agua está caliente pero el recipiente no, ¡Ése sí es apto para el micro!
También encontré que no todos los plásticos y papeles los debo usar porque pueden soltar toxinas.
TERCERO. Recuerda unas cuantas Reglas.
En cuanto a tiempo de cocción puedes considerar 6 minutos por medio kilo de comida aproximadamente. Así cocinarás prácticamente cualquier tipo de alimento incluyendo las carnes, vegetales, frutas.
Ten presente que parte de la cocción tiene lugar después de que termina de funcionar el horno por lo que te recomiendo que dejes reposar por lo menos 5 minutos las cosas dentro del micro.
Ahora cocino los pasteles deliciosos en 6 minutos pero ojo, si los dejo reposar 5 minutos dentro, quedan además súper esponjosos.
CUARTO. Acomoda bien tus alimentos.
Acomoda los alimentos de manera tal que la parte más gruesa esté hacia afuera y la parte más fina en la parte interna para tener una cocción pareja.
Si un alimento al cocinarlo en el horno convencional lo cubres, en el microondas también hazlo pero no con aluminio porque al ser metal saca chispas y quema, puedes usar papel especial para microondas. Así los alimentos se cocinarán más rápido por el vapor.
Para tener una cocción pareja los vegetales deben estar cortados del mismo tamaño.
Los alimentos se cocinan mejor si están separados.
A mitad de cocción es recomendable que revuelvas la comida para tener una cocción pareja.
Y QUINTO. No le tengas miedo.
Hay muchos mitos sobre el uso del microondas que debes dejar atrás ya que, si lo sabes usar, te hace la vida fácil y es un verdadero aliado en la cocina.
Yo busqué recetarios de cocina para microondas y con ellos aprendí lo básico y ahora ya puedo adaptar cualquier receta para hacerla en el micro.
Sólo es cuestión de darte tiempo de probar.
Silvia del Valle
@TipsMama5Hijos
Cuando me preguntan a que me dedico siempre contesto que soy cocinera, mesera, investigadora, niñera, enfermera, entrenadora, abogada, psicóloga, chofer, administradora, consejera espiritual, costurera, plomera, electricista, pintora, traductora, maestra, diseñadora de modas, maga, catequista, esposa, amiga, compañera…y estoy de guardia las 24 horas, los 7 días de la semana, y aunque, a menudo mi trabajo nadie lo ve, si falta, nada puede ir bien.
Y si hablamos de la paga… ni que decir, con solo escuchar esas vocecitas al final del día que me dicen ¡gracias mamita!, es suficiente para estar, más que bien pagada.
No importa en qué condiciones me encuentre, antes que todo y sobre todo, tengo la misión más importante del mundo, formar a otras PERSONAS para que sean hombres y mujeres de bien. Mi profesión es la más bella…la de ser mamá.
Y en mi caso soy mamá de 5 y la verdad es que he ido aprendiendo sobre el camino, y a veces a marcha forzada, como vivir y sobrevivir con ellos. Por eso aquí te dejo mis 5 tips básicos para optimizar tu tiempo.
PRIMERO. Pon alarmas en tu celular (ó en el reloj de la cocina).
Como a diario tenemos una lista interminable de actividades, hay que marcarse tiempos. Yo, uso las alarmas de mi celular para recordar cada actividad.
SEGUNDO. Ayúdate en la cocina.
¡Se práctica! cocina para varios días y congela las porciones necesarias, yo les pongo una etiqueta para saber que es y cuando lo hice. Y si tienes que cocinar día con día, busca herramientas que te hagan el trabajo menos pesado. Por ejemplo, mi cafetera hace el café en menos de un minuto y también tengo una olla de cocción lenta que me ayuda a dejar la comida cocinando mientras tengo que salir al banco o a realizar los pagos.
TERCERO. Planifica las actividades con tus hijos.
Muchas veces las actividades con los hijos nos sobrepasan, así que programa hacer varias actividades en una sola salida.
También busca que tus hijos te ayuden en las actividades de la casa, así pasarán tiempo juntos.
Cuando les ayudes en la tarea dedícale 10 minutos a cada uno en particular, para que veas cómo van y en que están fallando.
CUARTO. Si trabajas, programa las labores de la casa.
En estos tiempos en los que la situación económica está muy difícil, procura que tu trabajo no sea tan absorbente que no puedas pasar tiempo con tu familia, y que además las actividades de la casa no te agobien. Yo lo que hago es que las planeo para hacerlas durante toda la semana.
El lunes me enfoco a la sala y comedor, el martes a las recamaras, el miércoles a los baños, el jueves a la ropa, el viernes a la cocina y los fines de semana los dejo abiertos por que siempre salen imprevistos.
Y QUINTO. ¡¡¡Organízate!!!
Si, ya sé que lo hemos dicho una y mil veces pero... ¡Hay que organizarse!
No podemos caminar sin saber a donde queremos llegar, surgirán mil oportunidades y contratiempos pero con un destino definido nuestro criterio será más certero.
De verdad te recomiendo llevar una agenda, yo además tengo planificadores semanales y mensuales; y un menú semanal, así cuando tengo que ir al super ya sé que debo comprar.
Te lo aseguro, cuando empieces a usarlos, tu tiempo se multiplicará.