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Educando hijos que tiene inteligencia lingüística

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Tips del 10 de agosto de 2020

 

Educando hijos que tiene inteligencia lingüística.

 

Por Silvia del Valle

 

 

La inteligencia lingüística es aquí ella que nos permite tener habilidad con las palabras ya sea de forma escrita o verbal.

¿Cómo sabemos que nuestros hijos tienen más desarrollada esta inteligencia?

Pues son los niños que hablan muy pronto, que aprenden desde muy pequeños palabras difíciles y las saben aplicar adecuadamente, les gusta escuchar cuentos y cuando aprenden a leer les gusta leerlos, inventan historias y hasta inventan palabras que les dan un significado específico.

¿Qué pasa si mi hijo no tiene desarrollada esta inteligencia? Pues nada, solo es necesario ayudarle a desarrollarla, sabiendo que le costará trabajo y que debemos tener paciencia para que adquiera estas habilidades.

En cambio los niños que si tienen desarrollada esta inteligencia gozarán de las actividades que les pongamos y quizá quieran avanzar más rápido que el resto de sus hermanos, pero es necesario que aprendan a esperar y seguir el ritmo del grupo, así también estaremos educándolos en la inteligencia emocional.

Por eso aquí te dejo mis 5Tips para educar a nuestros hijos en la inteligencia lingüística.

PRIMERO. Que escuchen cuentos o fábulas desde pequeños.

El primer contacto que tienen nuestros hijos con el lenguaje es por nuestro medio. Aun antes de nacer, ya nos escuchan y van aprendiendo las palabras que van escuchando, a pesar de que aún no tienen un significado particular por que no conocen el concepto que les corresponde, si van aprendiendo sobre las palabras y van asociando sentimientos o estados de ánimo a ellas.

Si nosotros hablamos adecuadamente y les leemos cuentos, aun antes de nacer, nuestros hijos desarrollarán el gusto por las palabras y la inteligencia lingüística se desarrollará adecuadamente.

Cuando están bebés, es bueno continuar con dichas lecturas y dependiendo de su desarrollo, es bueno comenzar a enseñarles las imágenes o dibujos que trae el cuento para que vayan formando los conceptos de cada palabra o frase.

Además, conforme vayan creciendo es necesario aumentar la complejidad de las lecturas para que vayan adquiriendo mayor lenguaje.

Y cuando tengan ya capacidad de leer por sí mismos, es necesario que les fomentemos la lectura en voz alta y de comprensión.

Vale más que sepan leer bien a que sepan leer muchas palabras en poco tiempo.

SEGUNDO. Dialoga con tus hijos aunque no te puedan contestar.

Es importante que les hablemos bien, que les platiquemos lo que estamos haciendo o a dónde vamos a ir.

A veces puede parecer inútil, pero esto acerca a nuestros hijos al mundo de las palabras y les estimula el aprendizaje de las mismas.

También es bueno que cuando hablemos con nuestros hijos pequeños nos vean para que aprendan como se pronuncian las palabras.

Conforme van creciendo es necesario que les hablemos correctamente y no como a niños pequeños, así aprenderán la adecuada pronunciación de las palabras.

Con nuestros hijos más grandes, es necesario seguir fomentando los momentos de diálogo para saber lo que piensan y para compartir con ellos diferentes temas que les ayudará a incrementar su vocabulario y les hará más formada su conciencia ya que les podremos solucionar sus dudas.

TERCERO. Conforme vayan creciendo, cómprales libros de acuerdo a su edad.

Ahora existen libros que fomentan el desarrollo sensorial ya que están hechos de dientes materiales y además fomentan el gusto por la lectura porque hacen que nuestros hijos convivan con los libros desde muy pequeños.

También existen libros de plástico que pueden manipular desde bebés.

Ahora tenemos a la mano libros para todas las edades y de diferentes características, por ejemplo, ahora hay muchas series de libros de las obras clásicas de la literatura adaptadas para niños pequeños y también para jóvenes.

Solo es cuestión de buscar lo que les convienen más a nuestros hijos.

Para asegurarnos que están leyendo y comprendiendo lo que leen, podemos pedirles que nos platiquen un poco sobre el libro o que nos hagan un dibujo, lo principal es que comprendan lo que leen.

CUARTO. Que jueguen con las letras del alfabeto.

Para los niños que ya se sientan y pueden manipular cosas medianas existen letras de plástico que les ayudan mucho para conocer su forma.

Para los que ya están en proceso de lectoescritura hay letras de lija y de diferentes materiales que estimulan a las neuronas para adquirir los conceptos de cada letra.

Y por último podemos ponerlos a dibujar las letras, antes de que aprendan a juntarlas y hacer palabras con ellas.

La parte de la escritura también es importante y por eso podemos decirles que dibujen las letras y que les encuentren formas parecidas a elementos que les gusten para que las asocien y les sea más divertido escribir.

Y QUINTO. Que conozcan la poesía.

Algo que les ayuda mucho a desarrollar la inteligencia lingüística son los poemas y los hay para todas las edades.

Que aprendan a rimar para contar historias es algo genial y para lograrlo es necesario comenzar desde pequeños y que aprendan de nuestro ejemplo.

Como sé que no todos tenemos la habilidad de hacer poemas, existen libros de poemas de muy diversos temas que podemos compartir con nuestros hijos y poco a poco meterlos al mundo de la poesía.

Y por que no, permitirles que jueguen con las rimas y que hagan ellos mismos sus propios poemas.

Mientras más temprano estimulemos a nuestros hijos, más lograremos que se desarrolle esta inteligencia en ellos, pero nunca es tarde para comenzar a agilizarla.

Te invito a que demos el paso y tomemos cartas en el asunto para desarrollar la inteligencia lingüística y sepamos como educar a nuestro hijo si es la que tiene más desarrollada.

Es así que podemos ayudarle a desarrollar las demás si vinculamos el aprendizaje a estas capacidades que tiene y que nos servirán de ancla para adquirir el resto de los conocimientos.

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La importancia de la oración en la vida de nuestros hijos

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Tips del 3 de agosto de 2020

 

La importancia de la oración en la vida de nuestros hijos

 

Por Silvia del Valle

 

 

 

La oración es ese diálogo con Dios, que puede ser muy cálido o simplemente guiado por fórmulas preestablecidas, que nos permiten sentir a Dios cercano, inmerso en nuestra vida.

Es necesario que eduquemos a nuestros hijos integralmente y esto implica que también los eduquemos en la fe y en la práctica de la oración, como un estilo de vida.

Hay diferentes tipos de oración; la oración vocal, la oración privada, la contemplativa, la de alabanza, la de reposo, el propio diálogo con Dios, el ofrecer las acciones, etc.

Nuestros hijos deben conocerlas y escoger cuál es su favorita.

Por eso hoy te dejo mis 5Tips para ayudar a nuestros hijos hagan oración.

PRIMERO. Que tengan claro lo que es la oración.

Es necesario que nuestros hijos, desde pequeños, tengan claro que la oración es ese estar a solas con quien sabemos que nos ama.

Que es tratar con Jesús como amigos, que podemos contarle nuestras cosas y que Él nos va a escuchar siempre.

De esta forma, verán la oración como un diálogo y un encuentro y no como el momento cansado de rezar, donde me puedo dormir y nada más.

Está en nuestras manos que nuestros hijos aprecien la oración si con nuestro ejemplo hacemos que a ellos también se les antoje tener este encuentro y diálogo con El Amigo.

SEGUNDO. Propicia momentos de oración.

En este tiempo que nos ha tocado vivir, los periodos de oración son escasos.

Se dan cuando tenemos una preocupación, cuando estamos angustiados, cuando viene la enfermedad o la desgracia o cuando nos hace falta algo.

Pero es necesario que nuestros hijos aprendan que la oracion no sólo es para pedir, sino que también podemos agradecer o simplemente alabar a Dios.

Es por esto que debemos propiciar miembros de oración en las diferentes situaciones que se nos presentan para que nuestros hijos comprendan que la oración es un estilo de vida donde invitamos a Jesús a vivirla con nosotros y dialogamos con El.

TERCERO. Primero que sea guiada.

A orar se aprende orando, así como a hablar se aprende hablando.

Por eso podemos comenzar quitando y enseñando a nuestros hijos a hacer oración vocal y en voz alta. Que repitan con nosotros las o fórmulas u oraciones más conocidas.

Es aquí donde les podemos hablar sobre los diferentes tipos de oración y ayudarles a realizarlas.

Así formaremos el hábito en ellos y se volverá parte de su día.

CUARTO. Después déjalos que oren solos.

Una vez que hemos hecho el hábito en ellos y que conozcan los estilos de oración que existen, es necesario que aprendan a orar solos.

Primero podemos pedirles que oren en voz alta pero que lo dirijan ellos y poco a poco irles dejando periodos de oración personal.

Recodemos que la oración debe ser al nivel de madures y desarrollo de cada uno, por eso es personal.

Y QUINTO. La oración familiar es importante.

Cómo muy seguido decimos, el ejemplo arrastra.

Es necesario ser coherentes y vivir el estilo de vida de oración para que nuestros hijos comprendan que es posible hacer oración en cualquier comento del día y bajo cualquier circunstancia.

Si establecemos momentos familiares de oración, nuestros hijos estarán habituados a ella y después serán ellos, nuestros hijos, quienes la pedirán o recordarán que hace falta.

La oración por las mañanas, antes de los alimentos, al salir de casa, al comenzar una labor especial o importante, etc. Son momentos básicos de oración que se pueden hacer en familia para después propiciar momentos de oración personales.

Nunca es demasiado en cuanto a la oración, porque nunca es demasiado el tiempo de dialogar con quien sabemos que nos ama.

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¿A qué juegan nuestros hijos?

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Tips del 27 de julio de 2020

 

 

¿A qué juegan nuestros hijos?

 

 

Por Silvia del Valle

 

 

El juego es muy importante en la vida y desarrollo de nuestros hijos. Es una actividad vital por medio de la cual van aprendiendo poco a poco y adquiriendo madurez motora y psicológica ademas de que fomentamos valores y virtudes por medio de el.

Desde bebes, nuestros hijos comienzan a jugar con sus manitas, cuando se las descubren y luego con sus pies; y así con cada parte del cuerpo que se van conociendo. Esto lo hacen para sentírsela y para aprender a ubicarla y cómo funciona.

Conforme crecen comienzan a jugar con las cosas que les ponemos en la mano, aprenden que color tiene, aunque no sepan como se llama ese color, aprenden si es grande o pequeño, aprenden que se puede caer y muchas veces nos incluyen en su juego dejando caer los objetos para que nosotros se los regresemos, etc.

El juego forma parte de la infancia de nuestros hijos y conforme crecen se vuelve más y mas sofisticado hasta llegar a los deportes, que ya implican una disciplina y un compromiso.

Por lo mismo, debemos cuidar a los que juegan, porque aprenden del juego, y si los juegos son violentos, tramposos, ilegales o indignos, estarán aprendiendo esos valores y luego los llevarán a la vida, convirtiéndose en personas incómodas para la sociedad, por no decir nocivas.

Por eso es super importante que dejemos jugar a nuestros hijos y no los llenemos de actividades y tareas pesadas, así que aquí te dejo mis 5Tips para aprovechar el tiempo de nuestros hijos jugando.

PRIMERO. Mientras son pequeños, el juego didáctico es lo más importante.

Los tiempos de los bebés son muy diferentes a los nuestros. Tiene ciclos cortos y repetitivos.

Es muy importante establecer rutinas claras que incluyan el juego como parte del desarrollo y la estimulación.

Si nuestro hijo ya es capaz de mantener varias horas despierto, podemos comenzar a jugar con el para que sienta sus partes del cuerpo.

Podemos también ponerlo frente a estímulos de color y de movimiento para que comience a localizar su atención.

Conforme crezca podemos irle dado pequeños juguetes adecuados a su edad para que los vaya adoptando y le ayuden a su desarrollo psicomotor.

Para nuestros hijos preescolares, es necesario tener material didáctico como cubos grandes, piezas de lego grandes, rompecabezas de piezas grandes y de plástico o madera, pelotas, muñecos, etc. ya que sus manos son aun torpes y necesitan las piezas tener un tamaño adecuado para ellas.

Poco a poco y dependiendo de sus gustos, podemos conseguirles juguetes de plástico, de tamaño mediano a grande para que puedan manipularlos adecuadamente. Son recomendables figuras tiernas, o por lo menos no agresivas ya que la conciencia de nuestros hijos se está formando y es bueno presentarle modelos sanos.

Cuando nuestros hijos crecen, podemos ademas agregar algunas aplicaciones didácticas que ayuden a reafirmar los conocimientos jugando y que además les sirva de esparcimiento como los son el basta, completar palabras o el propio calculo mental.

Todo esto siempre con nuestra supervisión y con los cuidados que requiere.

SEGUNDO. Conforme crecen, establece un horario de juego.

Es importante establecer tiempos de juego y directrices para que nuestros hijos vayan estableciendo rutinas desde pequeños y cuando crezcan sepan que hay tiempo para jugar y tiempo para hacer los deberes y que el sano equilibrio entre ellos nos da estabilidad y tranquilidad.

TERCERO. Evita los juegos violentos o agresivos.

Es de vital importancia que nuestros hijos permanezcan lejos de los juguetes o juegos agresivos el mayor tiempo posible ya que la conciencia se les está formando y aun no tienen muy claro lo que está bien de lo que está mal y si nosotros les presentamos estos patrones de comportamiento o instrumentos de juego violentos como algo bueno o algo cercano, se les formará el concepto de que son buenos y que los pueden usar en el momento que deseen, al fin son un juego y les genera bienestar o placer.

Tengamos cuidado de que les acercamos a nuestros hijos.

CUARTO. Existen apps de juegos didácticos que nos pueden ayudar.

Debemos tener cuidado de no acostumbrar tampoco a nuestros hijos al uso de los aparatos electrónicos desde pequeños, pero si ya están en edad de usarlos, existen apps y herramientas que nos pueden ser de ayuda.

Por eso debemos darnos una vuelta por las tiendas de aplicaciones y ver cuales son adecuadas para la edad y madurez de cada uno de nuestros hijos. Y no solo eso, debemos darnos el tiempo de revisarla y de probarla para que podamos orientarlos en el uso de ellas.

Y QUINTO. Nosotros debemos estar incluidos en sus juegos.

El mejor elemento para que un juego sea exitoso o sea el mejor de todos es que nosotros, sus papás, estemos incluidos.

Por eso debemos establecer tiempos para jugar con nuestros hijos, a pesar del cansancio y de las preocupaciones cotidianas.

Si establecemos tiempos fijos para convivir y jugar con ellos, estaremos entablando y fortaleciendo vínculos con nuestros hijos, además de abrir canales de comunicación que después nos serán de gran utilidad.

Yo creo que como papás y mamás, lo que más buscamos es la felicidad y el bienestar de nuestros hijos, por eso estamos dispuestos a hacer un esfuerzo extra para regalarles a nuestros hijos nuestro tiempo de calidad para jugar y convivir con ellos.

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¿Cómo hablar con mis hijos adolescentes de las cosas trascendentes?

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Tips del 20 de julio de 2020

 

¿Cómo hablar con mis hijos adolescentes de las cosas trascendentes?

 

Por Silvia del Valle

 

La adolescencia es una época de cambios que a nosotros los papás nos implica muchos retos y que nos genera una expectativa muy grande ya que la sociedad se ha encargado de hacerla ver como la peor de todas las etapas de la vida de nuestros hijos.

Es cierto que es una etapa difícil ya que nuestros hijos experimentan muchos cambios fisiológicos y psicológicos, que las hormonas no nos ayudan ya que tienen una carga muy fuerte de ellas y los hacen actuar de forma impulsiva y diferente a como eran antes.

Pero también es cierto que podemos hacer que todo esto sea más fácil y llevadero si nos ponemos las pilas y nos damos a la tarea de tener un canal de comunicación franco y abierto con nuestros hijos, de esta forma podrán decirnos lo que van sintiendo y las dudas que van teniendo y nosotros podremos brindarles nuestra ayuda y contención cuando sean necesario; por eso aquí te dejo mis 5tips para lograr hablar de las cosas trascendentes con nuestros hijos adolescentes.

PRIMERO. Que la comunicación sea personal.

Es muy necesario que los temas más trascendentes los tratemos con cada uno en particular, sobre todo porque hay que hacerlo con mucha sensibilidad y cada uno tiene un modo de ser diferente y es necesario hablarles al corazón.

Muchos de los temas pueden ser algo penosos y si lo hacemos en familia puede ser contraproducente por eso es necesario que sientan la confianza de acercarse a platicarnos sus cosas para que cuando nosotros queramos hablar con ellos haya ya un canal de comunicación adecuado para hacerlo.

Este procesos debe ser natural y lleno de amor para que nuestros hijos sientan confianza y abran su corazón con nosotros, de otra forma buscarán a alguien más para hacerlo y la mayoría de las veces no sería la persona más adecuada y les podrá dar consejos fuera de la realidad.

SEGUNDO. Establece tiempos concretos.

Con mis hijos yo establecí un tiempo para cada uno y lo repetía cada semana, es decir, busqué que cada uno de forma particular tuviera una hora a la semana para platicarme sus cosas.

Logramos que se volviera una pequeña rutina y esto les daba mucha seguridad ya que sabían que tenían a mamá para ellos solos una hora a la semana.

Por supuesto que me podían contar sus cosas cuando necesitaran pero, ya sabían que lo más importante, lo que no querían compartir con los demás, lo podían hacer en su tiempo especial.

También debe quedarles claro que si hay algo muy importante antes de ese tiempo, nos podemos hacer espacio para hablar con ellos de forma personal en cualquier momento, esto les ayudará y les dará seguridad.

TERCERO. Busca lugares adecuados

No todos los lugares propician el diálogo, por eso es necesario buscar el espacio ideal dependiendo de las necesidades y características de cada uno de nuestros hijos.

Nosotros establecimos que con cada uno íbamos al parque a caminar o a tomar un helado, o con los más grandes nos vamos a tomar un café; de tal forma que sientan que tienen toda nuestra atención.

CUARTO. Aplica la escucha activa

Si, es necesario que sepan que los estamos escuchando, que nuestra atención es toda de ellos.

Por eso es necesario no estar contestando mensajes o hablado por teléfono mientras ellos nos platican sus cosas. También es necesario no estarles interrumpiendo a cada rato para contarles nuestras experiencias.

La escucha activa implica ponerles atención, hacer empatía, hacer que se den cuenta de que lo que nos dice resuena en nosotros y nos mueve.

Es muy importante que nuestro lenguaje no verbal, es decir, nuestros movimientos y nuestras expresiones sean de atención y empatía para que nuestros hijos se sientan escuchados y atendidos y entren en confianza.

Claro que es necesario darles nuestra opinión y quizá, centrales en lo que es importante ya que en esa etapa les cuesta trabajo ver las cosas objetivamente, pero siempre debemos hacerlo con delicadeza, con amor y con verdad.

Habrá ocaciones en que debemos ser firmes en el fondo pero suaves en la forma para que no se cierren y se bloqueen .

Cuando somos nosotros los que les queremos decir las cosas, es necesario preparar el camino para que la confianza esté presente y para que nos abran el corazón y la mente y así, nuestro mensaje les llegue y caiga en terreno fértil.

Y QUINTO. Comienza cuanto antes.

Nunca en tarde mara comenzar pero mientras mas pronto mejor.

No es necesario esperar a que sean adolescentes para establecer estos tiempos de escucha y diálogo con ellos; de hecho, es mejor hacerlo desde más pequeños para que cuando llegue la adolescencia, no haya problemas y las cosas sean muy naturales.

Que el canal de comunicación esté firme y así será más difícil que se pierda a pesar de los cambios de estado de ánimo de nuestros hijos.

Y si ya son adolescentes y la comunicación es difícil, es necesario establecer estos canales de comunicación lo antes posible.

Recuerda que cuando las cosas son más difíciles siempre tenemos el apoyo de Dios, a Él podemos pedirle que les ablande el corazón, que les ayude a escucharnos y a entablar el diálogo para llegar a ser un apoyo y contención para nuestros hijos.

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