Educar a los niños en inteligencia emocional

Por Silvia del Valle

@TipsMama5Hijos

Ayer mis hijos salieron del entrenamiento muy enojados por que los habían regañado injustamente. Los vi tan molestos que tuve que ayudarlos a manejar sus emocioneas. Esto me hizo pensar lo importante que es el saber hacerlo.

Las emociones, junto con los pensamiento y las acciones, determinan cada momento de nuestra vida, de ahí la importancia de conocerlas y controlarlas y así, afrontar determinadas situaciones para desenvolvernos en nuestra sociedad de un modo eficiente por eso, hoy les dejo 5 tips para desarrollar en nuestros hijos, desde pequeños,  la inteligencia emocional.

PRIMERO. QUE CONTROLEN SU IRA.

Hasta los 18 meses los niños necesitan, de forma indispensable, el afecto y el cuidado de sus padres, todo ello les aporta la seguridad suficiente para adaptarse en su medio y  para dominar sus miedos. Pero hemos de tener en cuenta que a partir de los 6 meses van a empezar a desarrollar el enojo o la ira, de ahí la importancia de saber canalizar sus reacciones y corregirles cualquier mala acción. 

Cuando mis hijos eran bebés y comenzaban a golpear a sus hermanos o incluso a nosotros o cuando gritaban enfurecidos porque no se les daba algo que ellos querían, los corregía diciéndoles que eso no se hace y que eso duele. Este tipo de cosas veces parecen  graciosas pero con el tiempo los vuelven unos tiranos, para evitarlo es importante establecer límites desde que nacen, los niños entienden mucho más de lo que expresan, de ahí la necesidad de razonarles y de controlar esas rabietas o berrinches.

SEGUNDO. RECONOCER EMOCIONES BÁSICAS.

Cuando son bebés, nuestros hijos lloran por todo, porque están mojados, porque tienen frio, porque tienen hambre, etc. Pero a partir de los dos años es una edad perfecta para iniciarlos en el campo del reconocimiento de emociones.

Para esto podemos debemos iniciar con las emociones básicas: alegría, tristeza, miedo y enojo. ¿Cómo? Mediante fotografías de rostros, mediante dibujos o preguntándoles cuestiones como:¿Qué te pasa? ¿Cómo te sientes? ¿Estás triste? ¿Estas enojado?...

Con mis hijos, cuando comenzaban a llorar sin razón me los sentaba en las piernas, les hacia estas preguntas y les explicaba que sí sólo  lloraban, yo no podía entender que sentían por eso ellos me lo tenían que decir.

Es muy importante que nuestros hijos puedan nombrar las emociones para después afrontarlas.

Ahora que son más grandes también los tengo que ayudar. Por ejemplo, con el problema de ayer, era tal su enojo que no podían expresarlo así que tuve que hacerles las mismas preguntas y hacerlos hablar sobre el problema para que fueran aclarando sus emociones y así poder tomar mejores decisiones.

Entre más grandes es más complicado porque experimentan nuevas emociones como la vergüenza, la ansiedad, la angustia o la frustración.

TERCERO. DESARROLLA SU EMPATÍA.

Para desarrollar un aspecto tan importante como este, es necesario razonar con ellos continuamente mediante preguntas como: ¿Por qué crees que está llorando tu hermana? ¿Cómo crees que se siente el abuelo tras lo que le has dicho? ¿Crees que papá está hoy contento?"

Es excelente para ellos darse cuenta que los demás también tienen emociones y que además las pueden controlar.

CUARTO. DESARROLLA SU COMUNICACIÓN.

Hablar con los niños, hacerles preguntas, razonar, jugar, poner ejemplos es basico en su educación. Debemos favorecer contínuamente el que puedan expresarse, poner en voz alta su opinión y sus sentimientos de forma respetuosa, que aprendan a dialogar.

Pero para poder dialogar también tiene que aprender a escuchar. Desde muy pequeños deben saber guardar silencio mientras los demás hablan, pero no sólo eso, debe ser una escucha activa, de ahí que sea recomendable hablarles despacio, frente a frente y terminando las frases con un ¿me has entendido? O  ¿estás de acuerdo con lo que he dicho?.

Con mis hijos tengo el problema de que son muchos y constantemente se arrebatan la palabra pero sigo trabajando en eso. No hay edad para dejar de trabajar en esta materia.

Y QUINTO. DEBEMOS TENER APERTURA A LA EXPRESIÓN DE EMOCIONES.

Es esencial que nuestros hijos tengan la confianza para que expresar lo que les preocupa, que les hace felices y también  infelices. La familia es el primer escenarios donde se desarrolla su vida, si les ofrecemos comodidad para que se puedan expresarse, lo harán después, en cualquier campo que lo necesiten.

Como siempre digo es indispensable que eduquemos con el ejemplo, nuestros hijos deben ver en nosotros que nos enojamos pero que nos controlamos, en mi caso, yo si les digo que estoy enojada o que estoy triste o que estoy muy emocionada. Se trata de que vean que las emociones son lo más normal y que todos las tenemos y busco ponerles el ejemplo de como nombrarlas.

Y por favor, debemos cambiar el concepto que nuestro padres y la sociedad de sus tiempo nos inculcaron, de que los hombres no deben llorar, que deben ser fuertes y que llorar demuestra debilidad, porque llorar es una forma de expresar una emoción, a veces se llora de tristeza pero a veces es de alegría. Llorar nos hace más humanos y en muchos casos nos da tranquilidad.

El saber comunicarse y el reconocer emociones propias y ajenas, son sin duda imprescindibles para que vayan madurando poco a poco y puedan  integrarse en la sociedad y ser felices en ella. Nosotros podemos darles esa oportunidad...

Regalos de Navidad hechos a mano

Por Silvia del Valle
@TipsMama5Hijos

Llegó Diciembre y con el, la epoca de Navidad y los medios nos invitan a comprar y comprar para darnos regalos costosos.
Pero, ¿de verdad los necesitamos? ¿de verdad será que entre más caro sea el regalo, el cariño es mayor?
La verdad es que esto no es cierto y creo que estamos en perfecto tiempo para preparar este año, regalos hechos a mano y con amor.
Nuestros hijos pueden hacerlos en las vacaciones y nosotros sólo debemos escojer que es lo que van a hacer y tenerles el material qu necesitan listo para poner manos a la obra.
Por eso aquí les dejo 5 tips sobre algunos regalos que nuestros pequeños pueden hacer para ésta Navidad.

PRIMERO. UN LINDO DIBUJO
Con nuestros hijos más pequeños podemos ponerlos a dibujar o colorear imágenes propias de la Navidad.
También pueden pegarles bolitas de papel o colorearlos con acuarelas, el chiste es que quede un hermoso cuadro y así las pueden dar o también como postal.
Cuando mis hijos estaban pequeños a ellos les encantaba hacerles dibujos a sus abuelitos que envolvían en bolsas de selofán y se las daban de regalo.

SEGUNDO. FIJURAS DE PAPIROFLEXIA
Uno de mis hijos se ha especializado en hacer hermosas figuras doblando las hojas de papel.
Esta es una técnica muy fácil de manejar para los niños y pre adolescentes y además de tenerlos entretenidos por largos periódos de tiempo, les desarrolla muchas capacidades como la psicomotricidad fina.
Mi hijo hace desde ranitas, hasta muñecos mas complicados como pandas o perros o hasta cajitas en tercera dimensión que podemos rellenar con chocolates o dulces tradicionales.

TERCERO. ALGO TEJIDO
En esta temporada hemos encontrado que dos de mis hijos tienen mucha habilidad para el tejido a gancho por lo que estamos haciendo cosas sencillas como bufandas y gorros para los regalos de éste año.
Espero que no me estén escuchado sus abuelitos, pero mis hijos están haciendo cositas muy sencillas pero con mucho amor.
Y en realidad la inversión no ha sido tanta y la verdad es que con los fríos que estamos viviendo, todo esto se valora más.

CUARTO. UNAS GALLETITAS
Regalar galletas caseras es una muy buena opcíon ya qe podemos hacerlas ahora que nuestros hijos salgan de vacaciones.
Así los mantenemos ocupados y de paso tenemos listos nuestros regalos.
Podemos comenzar a buscar una receta sencilla que puedan hacer nuestros hijos y conseguir los ingredientes con tiempo, también podemos conseguir unas cajitas o bolsitas de plástico, un lindo listón navideño y listo.

Y QUINTO. DEJA VOLAR TU CREATIVIDAD
Estas son sólo unas cuantas ideas que yo he puesto en práctica, pero estoy segura que si dejamos volar nuestra imaginación se nos ocurrirán muchas cosas más.
Y debemos quitarnos de la cabeza que si no es caro el regalo, no vale porque lo que nuestra imaginación produce es tanto o más valioso que lo que nuestro dinero puede comprar en las tiendas más renombradas.
Así que si tienes algo en mente no dudes en realizarlo. Muchas veces, lo que hacemos a mano es lo mejor, porque está hecho con amor y de acuerdo a las necesidades de cada persona.
Recodemos que hay que regalar afecto y no comprarlo.

Capacidad de asombro

Por Arturo Cuevas

@elartuvis

Una de las cosas que mas disfruto en estas fechas es el momento de los regalos, la mañana del 25 de diciembre, correr al árbol a repartir los regalos, ¿Y quien no? Pero no me juzgues por materialista e interesado, lo disfruto por que en ése momento sin apenas notarlo se da uno de los milagros más hermosos que hay (al menos desde mi perspectiva) y es el momento justo cuando los pequeños intentan abrir una caja que tiene una tarjeta con su nombre.

Ésa caja que envuelta en papel a prueba de jalones y con cinta adhesiva de sobra representa para quien lo  recibe una ilusión, una promesa cumplida, una meta alcanzada, un recuerdo.

Si es niño o niña, sus ojos se iluminan y aparece una enorme sonrisa en su rostro, con alegría brinca y grita de felicidad, con desesperación intenta arrancar las tres capas de envoltura, el moño, el lazo y la cinta adhesiva.  Esa emoción contagiosa que hace que los papás corran por sus teléfonos y preparen torpemente su cámara fotográfica, y tomen una imagen "pa'l feis" (Facebook) sin disfrutar con sus propios ojos lo que esperan que llenen de "likes" en la red social.

Esa emoción que llena los ojos de los chiquillos de humedad, de felicidad y hace que broten lágrimas al tiempo que suceden risas incontrolables y nerviosas, esa confirmación de aceptación de su inocencia que abiertamente muestra su capacidad de sorprenderse.

A ése milagro me refiero, y aunque no es exclusivo de los regalos ni de estas fiestas, es ahora cuando se da en su máxima expresión, aún así quien no sonríe cuando logra obtener de un niño esa mirada de admiración y boca abierta (expresión de sorpresa) al sacar una moneda de su oreja, o cuando le explicas porque vuelan los aviones o le dices cuantos goles metiste tu de niño.

La emoción que muestra un niño, sin pudor, sin miedo, sin prejuicio sobre algo nuevo es recordatorio de quienes somos y nuestra capacidad de creer, su inocencia nos llena de frescura y nos hace soñar, reír y disfrutar con ellos un momento, como niños.

Porque cuando el adulto recibe su caja simplemente se permite una sonrisa a manera de cumplido (ni muy fingida, ni muy acartonada; vaya que parezca natural) desenvuelve el regalo cuidadosamente y a veces ni siquiera termina de abrirlo cuando agradece y dice en voz alta lo que es: "¡Mira, una corbata! Y justo del color que estaba buscando" abraza ceremoniosamente a quien se lo da y sale rápidamente de la escena (aunque por dentro este brincando como un chiquillo, ha perdido la capacidad de asombrarse).

... Sigo pensando que los mejores regalos no se compran, se hacen...

Disfruta y asómbrate como pequeño en navidad...