Palabras del Papa Francisco en el ángelus este domingo 20 de septiembre en La Habana
«Agradezco al Cardenal Jaime Ortega y Alamino, Arzobispo de La Habana, sus amables palabras, así como a mis hermanos Obispos, sacerdotes, religiosos y fieles laicos. Saludo también al Señor Presidente y a todas las autoridades presentes.
Hemos oído en el evangelio cómo los discípulos tenían miedo de preguntar a Jesús cuando les habla de su pasión y muerte. Les asustaba y no podían comprender la idea de ver a Jesús sufriendo en la Cruz. También nosotros tenemos la tentación de huir de las cruces propias y de las cruces de los demás, de alejarnos del que sufre.
Al concluir la santa Misa, en la que Jesús se nos ha entregado de nuevo con su cuerpo y su sangre, dirijamos ahora nuestros ojos a la Virgen, Nuestra Madre. Y le pedimos que nos enseñe a estar junto a la cruz del hermano que sufre. Que aprendamos a ver a Jesús en cada hombre postrado en el camino de la vida; en cada hermano que tiene hambre o sed, que está desnudo o en la cárcel o enfermo. Junto a la Madre, en la Cruz, podemos comprender quién es verdaderamente «el más importante», y qué significa estar junto al Señor y participar de su gloria.
Aprendamos de María a tener el corazón despierto y atento a las necesidades de los demás. Como nos enseñó en las Bodas de Caná, seamos solícitos en los pequeños de detalles de la vida, y no cejemos en la oración los unos por los otros, para que a nadie falte el vino del amor nuevo, de la alegría que Jesús nos trae.
En este momento me siento en el deber de dirigir mi pensamiento a la querida tierra de Colombia, «consciente de la importancia crucial del momento presente, en el que, con esfuerzo renovado y movidos por la esperanza, sus hijos están buscando construir una sociedad en paz». Que la sangre vertida por miles de inocentes durante tantas décadas de conflicto armado, unida a aquella del Señor Jesucristo en la Cruz, sostenga todos los esfuerzos que se están haciendo, incluso en esta bella Isla, para una definitiva reconciliación.
Y así la larga noche de dolor y de violencia, con la voluntad de todos los colombianos, se pueda transformar en un día sin ocaso de concordia, justicia, fraternidad y amor en el respeto de la institucionalidad y del derecho nacional e internacional, para que la paz sea duradera. Por favor, no tenemos derecho a permitirnos otro fracaso más en este camino de paz y reconciliación.
Les pido ahora que se unan conmigo en la plegaria a María, para poner todas nuestras preocupaciones y aspiraciones cerca del Corazón de Cristo. Y de modo especial, le pedimos por los que han perdido la esperanza, y no encuentran motivos para seguir luchando; por los que sufren la injusticia, el abandono y la soledad; pedimos por los ancianos, los enfermos, los niños y los jóvenes, por todas las familias en dificultad, para que María les enjugue sus lágrimas, les consuele con su amor de Madre, les devuelva la esperanza y la alegría. Madre santa, te encomiendo a estos hijos tuyos de Cuba: ¡No los abandones nunca!. Y por favor no se olviden de rezar por mi».
Pedro de Legarreta Lores
Vladimir Putin en Medio Oriente.- La solución occidental del conflicto en Siria pasa por la salida de Bashar al Assad en favor de los opositores más moderados que también lo combaten. Pero el líder sirio es desde hace tiempo el principal aliado de Moscú en el Medio Oriente. Y el presidente ruso, Vladimir Putin, ya dejó claro que no está dispuesto a dejarlo solo en lo que insiste en caracterizar como una batalla por mantener la institucionalidad de Siria y en contra del fundamentalismo islámico. «Nosotros continuaremos apoyando al gobierno sirio en su lucha contra la agresión terrorista», dijo Putin este martes en referencia a Estado Islámico. «Le hemos proporcionado y le vamos a seguir proporcionándole la ayuda técnica militar que sea necesaria», reconoció Putin. «Llamamos a otros países a sumarse a esta iniciativa», agregó además el mandatario, quien parece creer que el temor por el avance del EI puede usarse para conseguir un respiro para el gobierno de Damasco. La evidencia, sin embargo, indica que Rusia está haciendo mucho más que continuar el apoyo que ya le venía proporcionando a las fuerzas de Al Assad. Según informa el corresponsal para asuntos diplomáticos de la BBC, Jonathan Marcus, en los últimos días varios aviones de transporte militar han llegado al aeropuerto de Latakia, en el noroeste del país, e imágenes de satélites muestran claramente trabajos de ampliación en la pequeña base. Y al mismo tiempo dos barcos cargados de vehículos y otros equipos también atracaron recientemente en la pequeña base naval que desde hace cuatro décadas Rusia mantiene en la vecina Tartus. Putin pareciera querer aprovechar que Siria se convierta en un estado fallido para aumentar su presencia militar e influencia política en la zona.
Se agrava el secesionismo catalán.- El Presidente de la Generalitat, Artur Mas, insiste en presionar para la independencia de Cataluña, con lo que esta región de España quedaría fuera de la Unión Europea, el Fondo Monetario Internacional, la Organización Mundial del Comercio y dejaría de percibir 600 millones de euros de apoyo del PAC, no podría volver a ingresar en la UE ya que se requiere el voto unánime de los países miembros, aumentaría la burocracia y no contaría con recursos del Bance Central Europeo para estabilizar los mercados. Quienes si obtendrían grandes beneficios serían las élites políticas catalanas, que podrán pavonearse por el mundo diciendo que ya no son los líderes de una provincia, sino de un Estado. En contraparte, el ciudadano catalán no obtiene beneficios reales, más allá de librarse del yugo español; impuestos, trámites y burocracia seguirán existiendo. A menos que expulsen a todos los que hablen en castellano, esta lengua se seguirá utilizando, aunque sea de manera marginal, pero en su comercio con sus vecinos, y no se engañen, serían sus principales clientes, tendrían que seguir utilizándolo. Pero Mas quiere llevar a la región autónoma de Cataluña por esa vereda, y parece que nadie, aparte del gobierno central, está dispuesto a impedirlo.
José Antonio Ortega
El informe del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos no aporta ninguna novedad, confirma lo que hemos dicho desde el principio: el GIEI y la CIDH no están para colaborar en el esclarecimiento de los hechos de Iguala de los días 26 y 27 de septiembre de 2014, sino para fabricar la versión de que el gobierno del Presidente Peña y el Ejército en particular son los responsables de la desaparición de los 43 de Ayotzinapa.
Y para esta fabricación, los “expertos” no dudan ni van a dudar en recurrir a descalificaciones sin sustento de la investigación de la PGR, a sembrar dudas para alimentar mitos y en falsear los hechos.
La aseveración central de que la incineración de los cadáveres no pudo ser posible, de inmediato fue refutada por el verdadero experto en la materia, el doctor John DeHaan: “He leído algunos de los reportes sobre este horrible caso y me decepciona saber la especulación y mala información que ha sido ofrecida como ‘conclusiones de expertos’ (…) sí, sí es posible reducir 40 cuerpos adultos a fragmentos y bultos frágiles” (El Universal, “Quema en Cocula sí es posible: científico citado por la Comisión”, 7 de septiembre de 2015).
El objetivo del GIEI es el mismo del Presidente de la CIDH, Emilio Álvarez Icaza: culpar con falsedad al gobierno de Peña para causarle el máximo daño posible y así facilitar las aspiraciones presidenciales de Andrés Manuel López Obrador.
Álvarez Icaza comparte el mismo proyecto político de López Obrador para hacer de México un país socialista como Venezuela o Cuba y siempre lo ha compartido. Por eso, López Obrador lo hizo ombudsman del Distrito Federal, lo reeligió en el cargo y lo apoyó cuando aspiraba a presidir la CNDH. Álvarez Icaza probó su lealtad a López Obrador cuando en 2006 se negó a condenar el bloqueo de avenidas que el tabasqueño impuso, violando los derechos humanos de los capitalinos.
Lo que al final importa, Presidente Peña, es cómo actuará usted: si se mantendrá firme en clarificar los hechos o cederá a la presión y hará de los militares “chivos expiatorios" por crímenes que no cometieron. En el segundo caso, eso de nada le servirá, porque ir contra usted es lo más conveniente para López Obrador, Álvarez y secuaces.
Pedro de Legarreta Lores
Mi padre siempre me dijo que lo que era de todos, terminaba por no ser de nadie, y como a nadie le preocupaba, se desperdiciaba, descomponía o despilfarraba. ¡Cuánta razón hay en esas palabras!
Efectivamente, el dinero público, que nos pertenece a todos los mexicanos, es utilizado por una camarilla como si fuera de su propiedad… pero como es de todos, ¿a quién le importa?
El reciente caso de las liquidaciones de los consejeros salientes del desaparecido Consejo Estatal Electoral es una muestra, pero lo mismo ocurre en la Cámara de Diputados, donde los presidentes de cada una de las 56 comisiones recibirán más de 400 mil pesos mensuales para gastar a discreción, y la supuesta planeación del gasto de 2016 que se presumió con una base cero que en realidad no ahorra costos significativos para la sociedad y que contempla un importante endeudamiento de las instituciones públicas.
Pero en esto, todos somos responsables. Los mexicanos estamos acostumbrados a dejar pasar las cosas, nos escudamos en que nada se puede hacer, que de todas formas la corrupción prevalecerá, que nadie escucha al ciudadano común pero, ¿usamos los mecanismos que tenemos a la mano para que la autoridad rinda informes, cumpla las leyes o evite infringirlas? Lamentablemente la respuesta es que no. Fuera de unos pocos, la mayoría de los ciudadanos ignora las atribuciones y responsabilidades que le tocan en la construcción y defensa de su país.
Lo más grave es que con el dinero, alimentamos y promovemos conductas indeseables en nuestras autoridades, si, porque ese dinero mal habido, mal ganado, fruto de la corrupción, el fraude o la mañosa aplicación de las leyes, terminan utilizándolo para conseguir más favores, puestos o canonjías.
Los ingleses dicen que hay que cuidar los peniques porque las libras se cuidan solas… nosotros lo hemos oído diciendo que hay que cuidar los centavos porque los pesos se cuidan solos, ¿pero es así en verdad? Lo malo es que en México no cuidamos ni los centavos ni los pesos; no cuidamos los centavos de la corrupción hormiga porque en muchas ocasiones encontramos la forma de favorecernos de ella para avanzar más rápido en la fila, evitar las sanciones por una falta de tránsito o el incumplimiento de alguna norma en el negocio, pero tampoco cuidamos los pesos del gran gasto que se ejecuta en el gobierno, porque nos es más sencillo permanecer indiferentes, lejanos, no comprometernos.
En México hemos alcanzado grandes cambios en el proceso democrático, pero hoy reafirmar ese proceso requiere de nuestra participación y compromiso, la democracia en nuestro país está en riesgo si queda en manos de unos cuantos, pero con la participación de todos se pueden lograr cambios significativos, incluso en el rubro del manejo del dinero, ¿te animas a participar?